Aunque digan que no soy tu tipo, aunque esté mal visto y bajo la ley no debamos estar juntos, no te dejaré ir y no le des más vueltas a la vida y disfruta los segundos conmigo.
Por qué la sangre no nos une como así lo quiere la gente.
Nos amamos, pe...
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Izana cambió de tema, dejando de lado las historias de su vida en el orfanato para hablar sobre su vida escolar.
—Como sabes, el otro día tuve el examen para becas universitarias con los otros calificados de mi generación— Comenzó con su tono casual—Fue bastante fácil para mí, y la mayoría de mis compañeros también parecían confiados—.
Mikey no quitaba su rostro de enamorado, pero luego, su expresión se volvió más seria cuando su amante demostró una mirada ansiosa por contarle algo interesante.
—Hubo un incidente. Una chica fue atrapada copiando durante el examen, estaba con un audífono escuchando audios en su celular que tenían la respuestas. Se armó un gran escándalo—.
Mikey levantó las cejas, sorprendido.
—¿En serio? Eso debe haber sido bastante incómodo— Comentó, imaginando la escena— Yo debería intentar eso para pasar historia...
—No lo necesitas bebé, me tienes a mí— Dejando su café a un lado, tomando la mano de su enamorado y acariciándola con delicadeza mientras entrelazaban sus dedos, los dos sonrieron—.
—Me desconcentro... Siempre empiezas a tocarme y en lo último que pienso es en estudiar—.
—¡Aquí tienen! ¡Un cheesecake de frambuesa y una copa de helado triple chocolate, menta y manjar con crema arriba—.
La hiperactiva mesera parecía enternecida con las miradas enamoradas de sus clientes adolescentes.
—¡Muchas gracias señorita!
Mikey estaba feliz, como un niño con su helado gigante. Izana lo miraba enternecido. La mesera se retiró y ambos continuaron con la conversación.
—Bueno, cuando pillaron a esa niña fue un desastre. La llevaron a la oficina del director porque intentó culpar al muchacho que estaba a su lado, él se enojó y la golpeó—.
Mikey asintió, comprendiendo de repente por qué había tantos rumores en la escuela sobre un supuesto incidente durante el examen de los estudiantes de último año.
—Eso explica mucho— Dijo, su voz llena de comprensión— Había escuchado rumores sobre un incidente durante el examen, pero las historias que llegaron a mis oídos eran bastante diferentes—.
Izana levantó una ceja, curioso— ¿Oh? ¿Qué tipo de historias?
Mikey se rió, recordando las versiones exageradas que había escuchado.
—Bueno, una versión decía que una niña había intentado seducir a uno de los becarios que estaban vigilando el examen, otra versión decía que había contratado a una estudiante de universidad para que tomara el examen por ella, suplantándola, incluso hubo una historia que decía que ella había intentado golpear a uno de los becarios por reprobarla—.