Era más de medianoche y la madre Chifuyu acompañada de Ryoko no dejaban de dar vueltas por el barrio escoltadas de policías. Buscaban al pequeño rubio, que según Keisuke, había sido secuestrado y por eso tenían el apoyo necesario para buscarlo después de que describiera como dos sujetos con máscaras lo habían interceptado. Baji lo había visto a lo lejos y no pudo llegar para rescatarlo.
El moreno había decidido quedarse en la entrada de las escaleras del edificio puesto que por su seguridad todos los adultos le habían ordenado quedarse en casa, pero se trataba de su novio y no podía quedarse de brazos cruzados, tampoco quería preocupar más a su madre así que optó por quedarse a vigilar a los alrededores del edificio.
Kazutora había ido a la casa de una amiga que lo estaba ayudando a estudiar y no llegaría hasta mañana, así que estaba solo y tampoco quería preocupar a sus amigos.
Comenzaba a desesperarse al ver su reloj marcar el paso del tiempo sin dar resultados, su respiración parecía agitarse con cada segundo y solo pudo reaccionar jalando de sus cabellos para no perder el control. Su preocupación por Chifuyu se apoderaba de él, necesitaba saber que al menos estaba bien.-Baji-san... -Su vos salió de sus labios como un susurro ahogado, lleno de angustia y dolor de lo recién vivido. parecía como si hablar le lastimara al igual que cada paso que daba. Sus ojos, enrojecidos por el llanto, se encontraron con los de Baji en un momento cargado de emociones encontradas-.
-¡Chifuyu!
El moreno se acercó con pasos lentos y cautelosos, sus ojos recorriendo cada rincón del rostro de Chifuyu, registrando cada moretón y cada señal de angustia. Sus brazos se extendieron instintivamente, queriendo envolverlo en un abrazo reconfortante, pero algo en la mirada perdida de su novio le hizo detenerse.
-Mi dulce gatito... -Murmuró, con voz entrecortada por la emoción y la preocupación. No sabía qué decir, cómo consolarlo cuando el dolor y la desesperación se reflejaban tan claramente en sus ojos-.
El rubio levantó la mirada hacia Keisuke, pero sus ojos parecían vacíos, como si la intensidad de la situación hubiera apagado cualquier destello de vida en su interior. Un nudo se formó en la garganta de Baji al darse cuenta de que, incluso ahora que estaban juntos de nuevo, la angustia y el sufrimiento seguían presentes en el corazón de Matsuno. ¿Qué rayos había pasado?. Mataría al responsable que le había hecho todo este daño a Chifuyu, lo haría sufrir y pobre del que se interpusiera.
El corazón de Baji latía con fuerza, una mezcla de rabia y dolor ardiendo en su pecho mientras contemplaba a Chifuyu, vulnerable y herido frente a él. Se acercó un poco más, con cuidado, como si temiera que un movimiento brusco pudiera hacer quebrar el frágil equilibrio emocional de su novio.-Mi pequeño gatito... -Susurró el moreno, su voz llena de amor y preocupación, pero también de una determinación feroz. No permitiría que nadie más lastimara a Chifuyu, se lo había prometido a sí mismo- Vamos a encontrar a esos desgraciados y hacerles pagar por lo que te han hecho-.
Chifuyu levantó la mirada hacia su novio, sus ojos aún empañados por las lágrimas y el sufrimiento, pero algo en la intensidad de la mirada de Keisuke le transmitió una chispa de esperanza. Por primera vez desde que comenzó esta pesadilla, Chifuyu sintió que no estaba solo, que tenía a alguien a su lado que lucharía por él, sin importar qué.
-Baji-san... -Murmuró el rubio, su voz temblorosa pero llena de gratitud. No había palabras suficientes para expresar lo que sentía en ese momento, pero el simple hecho de tener a Baji a su lado, dispuesto a protegerlo, le dio fuerzas para seguir adelante-.
Baji se inclinó lentamente hacia Chifuyu y lo abrazó con ternura, envolviéndolo en su cálido y reconfortante abrazo. Podía sentir el temblor en el cuerpo de Chifuyu, la fragilidad que se escondía tras su aparente fortaleza, pero también percibía la determinación que ardía en su interior, lista para enfrentar cualquier desafío que se interpusiera en su camino.
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Aunque Digan Que No Soy Tu Tipo [IzanaxMikey]
Fiksi PenggemarAunque digan que no soy tu tipo, aunque esté mal visto y bajo la ley no debamos estar juntos, no te dejaré ir y no le des más vueltas a la vida y disfruta los segundos conmigo. Por qué la sangre no nos une como así lo quiere la gente. Nos amamos, pe...