32- seguir adelante no es tan sencillo

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Las semanas pasaron y Martina estaba regresando lentamente a donde estaba antes del tiroteo. Su estómago se había curado y ella abandono las muletas por un bastón. Odiaba usarlo al principio pero Lourdes le dijo que le daba arrogancia por lo que dejó de odiar la pieza de metal y comenzó a aceptar su papel en su vida por el momento

Martina estaba de pie en su oficina, cerca de la ventana que daba al garaje de la tienda y miro el lugar a donde le habían disparado. Ella había estado lo suficientemente bien como para trabajar pero no podía obligarse a entrar al garaje y a donde tenían los autos

Habían instalado un sistema de seguridad que nunca sintieron la necesidad de tener hasta hace poco y compraron un sistema de sonido que se conecta a la alarma de la puerta

Ahora, cada vez que alguien entra a la tienda, la música se interrumpe señalando la llegada de alguien. Tantos cambios en el lugar que solía ser su santuario, y por primera vez en años no encontró consuelo en el lugar

Sentía pánico cada vez que se acercaba al garaje y se resignaba al papeleo. Su miedo a la habitación era conocido por todos a pesar de su capacidad para ocultarlo y ellos simpatizaban con ella y se preocupaban por su estado mental

En la oficina principal de la ciudad, cinco mujeres se reunieron para almorzar y discutir el dilema de la chica de pelo rubio

-no se que más hacer. Marti se vuelve loca cuando no se mantiene ocupada y la tienda la mantiene cuerda. Sin ella, no se como se las arreglara. No entra al garaje, ella entra en pánico cada vez que pone un pie cerca de el- dijo sam preocupada

-los chicos están con ella ahora verdad? Saben que no la dejen en paz?- pregunto Lourdes preocupada

-Kevin y Ramiro no la dejaran sola. Ni siquiera para correr al mercado de la esquina. Son tan paranoicos como nosotras- aseguró Selena

-no se que hacer tampoco, ella no habla de eso. No conmigo. Necesito que me deje entrar pero ella realmente no me deja- dijo Lourdes tristemente

-que hay de Bianca?- sugirió kat de repente

La habitación llena de mujeres la miro confundida -que hay de ella?- pregunto Mica

-bueno. Marti necesita hablar, tal vez la persona con la que experimento esto pueda comunicarse con ella. Ambas lo experimentaron juntas y tal vez puedan ayudarse mutuamente- sugirió kat cautelosamente

-eso... en realidad tiene mucho sentido y se que Marti no hablara a nadie sobre esto, es terca. Tal vez si hablamos con Bianca, ella puede ayudar- Selena agregó sorprendida de que ninguna de ellas lo hubieran pensado

-la llamare, es mejor tener esta conversación sin Marti y últimamente siempre esta cerca- dijo kat levantando su teléfono de la oficina

-donde esta ella ahora?- pregunto sam

-almorzando pero generalmente esta en la cafetería con su banda y sus amigos de futbol- dijo kat

-podríamos enviarle un mensaje- dijo mica

Kat negó con la cabeza -la escuela hace que los niños apaguen sus teléfonos. Solo pueden tenerlos antes o después de la escuela para que puedan salir de paseo. Acabo de llamar a un profesor en el café y ellos le dirán que venga aquí. Puedo escribirle un pase si ella llega tarde. Ustedes tienen períodos libre hoy, así que no es gran cosa-

Continuaron durante un par de minutos hasta que llamaron a su puerta -adelante- dijo kat

Bianca interrumpió presa del pánico y se congelo cuando vio a las mujeres en la habitación. Mirando a su alrededor, noto que alguien faltaba

Desde mi tumba || Martuli G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora