starboy : f1 imagines

★ - real orgasm

Charles se sienta en su sofá y pone los pies sobre la mesa de café. Ella se sienta a su lado y les cubre con la manta.

Toma el control remoto y enciende la televisión.—¿Qué vemos esta noche?—Le preguntó, hojeando las miniaturas de Netflix.

Se pone cómoda con cojines a la espalda y trae su taza de té.—Te dejo elegir esta vez.

Suspira y sigue desplazándose, a veces leyendo el resumen antes de finalmente ponerse algo.

Cuando comienza la película, ella toma un sorbo de té y le pasa la taza a Charles, quien también toma un sorbo. No son mejores amigos por nada. Se conocen desde pequeños y siempre comparten todo. Así que beber en la misma taza que ella ciertamente no es un problema.

Y esta noche vino a su casa para consolarla. Su novio la engañó cobardemente y luego la abandonó, como a un pobre juguete. Charles la ayuda a superar esto. Incluso cuando ella estaba en su punto más bajo, él estaba allí.

Y que ironía que haya puesto una película donde la protagonista engaña a su novio con todo el mundo.

—Uhm, ¿quizás quieras cambiar?—Él le pregunta sobre la tercera escena de sexo que ocurre, donde el personaje principal parece muy entusiasmado con la idea de ser atrapado.

—Mh no, está bien.—Ella apretó sus muslos, deseando que su novio fuera como en la película, que sabe cómo darle placer a una mujer.

—¿Estás bien?—Le preguntó, poniendo su mano en su muslo. Realmente no debería haber hecho eso. A pesar de que él es su mejor amigo, ella no puede controlar sus hormonas y no puede evitar mojarse un poco más.

— Yo... estaba pensando en el hecho de que nunca me he corrido tan brutalmente. Tal vez nunca me corra, no lo sé, jaja.—La miró atónito. No porque nunca hablen de sexo. Sino más bien por el hecho de que ella le confiesa que nunca ha tenido un orgasmo.

—¿Tan malo era tu novio? —Ella se encogió de hombros.

Charles se sonroja sólo de pensar en T/n, corriendose por primera vez. 

—¿Tú... quieres que te muestre qué es un verdadero orgasmo?—Le preguntó, casi susurrando debido a su timidez.

Ella volvió la cabeza hacia él, con las mejillas rojas. ¿Qué debería hacer ella? Está tan cachonda ahora que no puede decir que no. ¿Pero eso también significa arruinar su amistad?

—S-sí... Por favor.— El propio Charles no esperaba que ella dijera que sí. Él acerca su cabeza a la de ella, sus labios a unos milímetros de los de ella. Puede sentir su aliento en sus labios y se le pone la piel de gallina. Cierra los ojos, esperando que Charles dé el primer paso, porque ella no se atreve.

Justo cuando estaba a punto de abrir los ojos nuevamente, porque pensó que Charles no se movería, sus labios se pegaron a los de ella. Su mano se desliza por su cuello y acerca su cabeza a la de él, profundizando el beso con pequeños movimientos. Él avanza tanto que ella se tumba en el sofá, él encima de ella.

—Tienes que decirme ahora si quieres parar.—Él besa sus mejillas.

—S-sigue por favor...—Él besa su mandíbula, debajo de su oreja, su cuello y su clavícula. Sus manos se deslizan debajo de su camiseta, quitándola lentamente. Ella siente escalofríos recorriendo su columna cuando él comienza a frotar sus manos contra su cintura, caderas, muslos y parte superior del trasero.

Se encontró gimiendo suavemente, pero naturalmente, sin fingir. Sus besos provocan sus pechos, desabrochando su sujetador fácilmente. Él la miró, como si le estuviera preguntando si podía tocarlo.