starboy : f1 imagines

★ - passenger princess

creditos: earlgreyflowers

Siempre habías sido una princesa pasajera, dispuesta a conformarte con los auxiliares y las direcciones. Así que fue una suerte que Lando odiara ser pasajero y le encantara el control que tenía al volante. Ambos estaban en Estados Unidos antes del inicio del triple encabezado, disfrutando de un poco de tiempo fuera de las carreras. Habías pasado el día explorando y ahora Lando te llevaba de regreso al hotel. Te encantaba el tiempo de calidad que podían pasar juntos, especialmente cuando Lando se veía tan bien como hoy.

Llevaba una camiseta blanca que enfatizaba sus bíceps con un par de jeans negros holgados. Sus gafas de sol y su nuevo corte de pelo lo hacían ver asquerosamente guapo y lo sabías. El ruido del motor te había inducido a dormir, con tus visiones llenas de Lando. Sus grandes manos rodearon una botella de agua y sus labios alrededor del cuello. Una pequeña gota de sudor deslizándose por su cuello, o la forma en que su mano descansaba sobre tu muslo cada vez que te sentabas. Un pequeño bache te despertó y tu cabeza golpeó ligeramente la ventana.

—Lo siento bebé, ¿te desperté?—Pregunta Lando, su mano vuelve a descansar sobre tu muslo. Tarareas en voz baja, sin estar aún completamente consciente. Estiras las piernas en tu asiento lo mejor que puedes, gimiendo ante el alivio.—¿Estabas soñando conmigo T/N?—Lando pregunta, mirándote. —Tal vez.—murmuras tímidamente.—¿Por qué lo preguntas?—Lando sonríe.—Sonaba como si lo estuvieras. —Explica, guiñándote un ojo y haciendo que el calor suba a tus mejillas.

Consultas la pantalla del tablero y te das cuenta de que todavía estás a 45 minutos del hotel. Te recuestas en tu asiento y el latido entre tus piernas debido a tus sueños se vuelve más prominente. Te retuerces ligeramente, intentando aliviar la presión. Ver a Lando mientras conduce no ayuda a tu causa, admirar sus brazos apoyados contra la puerta y la forma en que sus dedos rodean el volante. Lando puede ver tu lucha, la forma en que comienzas a inquietarte mientras tus ojos recorren su cuerpo.

—Cariño, deja de retorcerte, me estás distrayendo cuando intento conducir.—Él te reprende, pero el tono de su voz sólo te vuelve más loco. Él nota la forma en que tu respiración se entrecorta y se ríe.—Vaya, estas tan desesperada que el solo hecho de que yo sea exigente te excita. Qué puta, ¿no?—Pregunta, su pulgar comienza a frotar círculos contra la piel de tu muslo. Asientes, con las piernas apretadas pero la mano de Lando te detiene.

—Si tengo que detenerme, no podrás caminar durante la próxima semana y no querrás tener que explicárselo al paddock, ¿verdad, cariño?—Pregunta burlonamente, su mano golpeando tu muslo. Gimes ante la sensación, tartamudeando un magro—Por favor, Lando.— Él se ríe de ti y el sonido provoca escalofríos en tu piel. —Te lo advertí.—Dice siniestramente antes de salir de la carretera. —Tienes suerte de que conozca mi camino, bebé, o de lo contrario tendríamos audiencia.—Lando resopla y finalmente detiene el auto en un área apartada.

—Te gustaría eso, ¿no?— Pregunta, desabrochándose el cinturón de seguridad y deslizando su asiento hacia atrás.—Te gustaría que la gente pudiera ver lo que te hago, lo tonta que te vuelves con mi polla.—Lando se acerca y te desabrocha el cinturón de seguridad antes de sentarte en su regazo. Sientes su dura polla debajo de ti, tu cuerpo inconscientemente se frota contra él en busca de fricción. Su mano te golpea el trasero, deteniendo tus movimientos.—Deja de ser tan jodidamente codiciosa, no dije que pudieras hacer eso.— Susurra, una mano se envuelve alrededor de tu garganta.—Voy a tener que castigarte por no escucharme mi amor.—, dice burlonamente, colocando tu cabello detrás de tu oreja.

—Sal del auto.

Tu boca se abre ante su petición y él simplemente te levanta una ceja.—¿Tartamudeé? Sal del auto ahora.—Te lo dice despacio. Luchas por salir, Lando te sigue. Cierra la puerta del conductor antes de empujarte contra ella.—Qué puta tan ansiosa, sabía que correrías el riesgo. ¿Quieres arriesgarte, bebé? ¿Ver si alguien te ve llena de mi polla? —Pregunta Lando, dejando besos en tu cuello entre sus frases.