✧ 𝒟𝑒𝒶𝓇 𝒫𝒶𝒾𝓃𝓉𝑒𝓇

02

Ahí estabas, parada frente aquel hombre tan alto y guapo, ambos se quedaron en silencio, no era un silencio incómodo, era un silencia agradable, ambos admirando la belleza del otro

– Buenos días, señorita Seymour – hablo satoru para romper el silencio, tenía el acento muy marcado ya que no era su idioma natal, juraste que la voz de ese hombre era igual de atractiva que su imagen – Buenos días, señor Gojo – respondiste con tranquilidad y le sonreíste

Satoru hizo una reverencia para  demostrar respeto y solo sonreíste, ambos pasaron por aquellas grandes puertas entrando en aquel castillo, le diste un recorrido rápido, satoru estaba callado escuchando todo con  atención, llegaron a aquel gran jardín lleno de flores

– Oh, es un lindo paisaje – hablo satoru mirando con admiración aquel gran jardín floral – y bien, que paisaje quiere que pinte? – eso te tomó por sorpresa y solo lo miraste – paisaje? Uhm... realmente es un retrato

El rostro de satoru pasó a uno sorprendido, te preocupaste ya que asumiste que él sólo pintaba paisajes y te daría demasiada pena hacerlo venir hasta aquí por algo que ni era

– Ya veo... no suelo hacer retratos... pero puedo hacer la excepción por usted – aquel albino sonrío, su sonrisa tan blanca y perfecta te cautivo totalmente – Eso sería perfecto! – la emoción gobernaba tu voz, y solo sonreíste, nunca te habías sentido tan cómoda ante la presencia de un hombre, pero esto era nuevo

El de origen japonés se sentó en una de las bancas del jardín invitandote a sentarte, hablaron y hablaron durante horas, notaba un cierto interés en satoru hacía ti, ambos parecían demasiado contentos hablando entre sí, pero de un momento a otro notaste una mirada...

Era Henry que los estaba viendo desde aquel gran ventanal de su oficina, miraste en su dirección y solo le sonreíste, él te devolvió la sonrisa y se alejo del ventanal

– Él es el duque? – cuestiono satoru, lo voltearte a ver rápidamente – Sí, el es el Duque de Inglaterra – intentaste no tocar el tema de que era tu esposo ya que no lo considerabas como tal

– Su esposo, cierto? – volvió a preguntar satoru, simplemente suspiraste y sonreíste – Así es, él es mi esposo – a satoru se le hizo raro que no dijeras "amado esposo" pero decidió ignorarlo y siguieron hablando

...

Hablaron hasta que llegó el atardecer, ambos miraron a aquel gran esfera que brillaba de un tono anaranjado demostrando un bello atardecer que los cautivo

– Es tan lindo – la voz de satoru reflejaba admiración mientras miraba aquellas vistas, reíste suavemente al notar lo embobado que se miraba, satoru rápidamente volteo a verte cuando escucho aquella delicada risa

– Lo es, las puestas de sol siempre son magníficas por estos lares, son una de mis cosas preferidas – decidiste ser sincera, algo que nunca te permitías para encajar en los estándares de tu esposo

El momento fue magnífico, ambos se quedaron mirando directamente a los ojos, había un brillo inusual en ambos, el momento se volvió tenso y cada vez se acercaban más

Era amor a primera vista

Fueron interrumpidos por uno de los mayordomos indicando que la merienda estaba lista, ambos miraron rápidamente a aquel hombre, sus corazones latian a mil, ambos asintieron y fueron guiados hasta una de las mesas principales del jardín, la más alejada, era una simple, su techo era una especie de domo, sus columnas eran a un estilo griego muy lindas, y quedaba bajo un gran sauce llorón

Estaba alejado de la vista de cualquier ventanal del castillo, en la mesa había diferentes platillos con pequeños postres y las tazas de té

– Disculpa Jin, y Henry? – preguntaste a aquel mayordomo – Oh, el señor no va a poder venir ya que tiene mucho trabajo – simplemente asentiste y el mayordomo se retiro del lugar

...

Hablabas a gusto con satoru, tomaban el té y mirabas como satoru disgustaba cada postre que había, ambos reían y gozaban de su compañía hasta que llegó tu criada Rose

– Señorita Charlotte! – exclamó Rose acercándose rápidamente a ti, se inclino un poco y susurro a tu oído – El señor Henry esta en su oficina... pero no esta solo, esta con una mujer – tu expresión cambió a una de sorpresa lo cual altero un poco a satoru, Rose siguió hablando – No nos permiten entrar más que el criado de confianza del señor, y cada que paso frente a aquella puerta se escuchan ruidos cuestionables

Rose te miro con algo de pena, simplemente asumiste todo muy rápido, Henry te estaba engañando, pero eso él ya te lo había advertido si no  lograba darme un heredero, así que estabas tranquila, no te afecto

– Gracias por la información, Rose – sonreíste de forma amable y te despediste de aquella mujer con un abrazo, Rose se retiro para dejarlos a solas nuevamente

– Sucedió algo? Señorita Seymour – era Satoru, estaba intrigado por todo, fue tan rápido y el cambio de tus expresiones lo alteraron – Oh no es nada, simplemente me estaban indicando algunas cosas – le sonreíste, no pensabas decirle que te estaban engañando

– Hmm... si usted lo dice – la voz de  satoru no sonaba confiada, notaste que aquel hombre era muy curioso y simplemente reíste – De qué se ríe? – cuestiono aquel albino – De tu curiosidad, eso es algo lindo – no temiste en decirme un cumplido a lo cual el de ojos azules se sonrojo levemente

Y así pasaron hasta que cayó la noche, habían momentos donde sus manos rozaban y leves momentos de tensión, se retiraron de aquel lugar adentrándose nuevamente en el castillo

– Que pase una linda noche, señorita Seymour – se despidió besando suavemente tu mano en forma de respeto, a lo cual reíste con ternura – Dime Charlotte, y que usted también tenga una linda noche – hiciste una leve reverencia para luego ambos caminar a sus respectivas habitaciones

...

Entraste a tu habitación donde estaba ya esperando Henry, simplemente sonreíste cuando notaste su mirada en ti, pasaste al frente de él y te adentraste en aquel gran armario, cambiando tu vestido por uno para dormir y una bata afelpada azul

– Que tengas dulces sueños, cariño – te  recostaste en aquella amplia y suave cama, no te respondió solo se acostó de lado dandote la espalda, solo suspiraste y decidiste dormir

Henry esta cansado... cansado de su encuentro romántico con otra mujer, fue lo que pensaste antes de quedar profundamente dormida sin ninguna pena o molestia, solo pensando en aquel albino que llegó a tu vida