1-La fuente. (EDITADO UNA VEZ)

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"Su voz, era capaz de calamar mi mente"-M.

Luke Hemmings.

Recién habíamos acabado el concierto, y apenas eran las 6:00 pm.

—¡Hey!—dijo Calum acercándose a mi—¿La llamarás?—Preguntó sentándose a mi lado en el sofá de la sala del Backstage, Michael y Ashton pusieron pausa al juego en la pantalla y me miraron con una sonrisa socarrona.

Una chica (Estoy casi seguro de que era una grupie) con un vestido milimétricamente corto, ajustado y tacones de 20 centímetros, con el cabello tintado de rubio y mucho maquillaje se acercó a mi al final del concierto y me coqueteo por los 15 minutos mas largos de mi vida. Metió su numero en el bolsillo trasero de mi pantalón cuando se retiraba de manera "Sensual", pero no parecía tener más de 17 años. Mientras los chicos reían detrás mío por mi mueca de horror en aquel momento.

—No lo sé, ¿Debería tener mi sesión de silicona esta noche?—bromeé. No se como sus padres la dejaban vestir así, y estoy casi seguro de que al menos el 45% de su cuerpo estaba hecho de silicona, Iugh.

Pero hoy en día ya no me extrañaba.

Ellos rieron.

—Nah, mejor vamos al club al lado del hotel. Hace bastante que no salimos todos juntos. Allí podemos conseguir algo también—Propuso Michael.
—Oh Si, necesito un poco de diversión hoy. Y las chicas de los clubes simpre son mejores que las grupies—Concluí. Eran más relajadas y experimentadas. Los chicos asíntieron estando de acuerdo conmigo.

Esperamos un poco a que el sol se escondiera y partimos al club.

Cuando llegamos, lo primero que distinguí fue una fuente un poco más adelante del club, podía admirarse desde la entrada. Era muy bonita, las luces eran de colores y tenía pintado un girasol pintado a mano justo en el centro de ella.

Entramos y estaba sonando a tope un tipo de remix de "Small Bump" de Ed Sheeran. Conseguimos un lugar en la zona V.I.P* y a los 5 minutos teníamos encima al menos 4 mujeres tocando todo lo que podían.

—Dime, ¿Quieres una bebida?—Ronroneó una de las chicas pegada a mi cuello. Esta era demasiado empalagosa.
-Ehr...Iré yo por ella —medio dije con una sonrisa forzada—¿Quieres una? —Pregunté. Ella asintió animadamente y se recostó en el sillón, poniendo sus ojos sobre Calum, y próximamente sus manos.

Con este tipo de chicas solo hay que enrollarse, hablando puede se bastante molesto.

Suspiré alejándome y haciéndome camino para llegar a por las bebidas, tambaleándome un poco gracias al alcohol que ya había ingerido, pero logrando caminar recto.

Llegué a la barra y escogí un lugar al lado de una ventana, pedí una cerveza y me puse observar por esta. Pude apreciar la misma fuente de hace rato, y pude ponerle un poco más de atención. La habían encendido, y el agua brotaba suavemente desde la punta, hasta caer hacia las orillas. Mi mente, perdida en mis pensamientos, seguía analizando l fuente frente a mí, pero noté, que ....esta vez había una chica en ella.

La observé con más cuidado y detenimiento.

La chica era pequeña de tamaño, aparentaba ser una muñequita de porcelana que podía caer y romperse en cualquier momento. Tenía el cabello rojo brillante y esponjado, tez blanca y muchas pecas esparcidas por todo su rostro, que cruzaban desde su fina nariz hasta sus sonrojadas mejillas. Llevaba puesto un vestido que parecía ser bastante viejo, de un tono rosa deslavado y con un gran jersey beige encima, junto con unas desgastas botas cafés. Todo lo contrario a las chicas que había visto en lo que iba de la noche. O de mi vida.

Tenía los brazos extendidos hacia los lados y los ojos cerrados, y se movía suavemente al ritmo de la canción, con gracia y elegancia. Parecía que esta imaginando como si volara, en la inmensidad de la nada, con el frío viento de la noche alborotándole el cabello y moviendo su vestido, casi como si lo acariciara con diligencia.

De pronto, abrió los ojos, azules con un tenue verde mezclado y los enfocó en mi, que miraba a travez de la venta la majestuosa escena. Mis ojos se encontraron con los de ella, por primera vez en mucho tiempo, perdí el aliento. Todo desapareció. Mi estomago se revolvió y se hizo presente un cosquilleo en mi. No había nada más que mi respiración y su mirada fija en la mía, ella esbozó una sonrisa pequeñita y ladeó la cabeza hacia su lado izquierdo, haciendo un gesto divertido a modo de saludo.

<¿Me saludaba a mi?>

No podía reaccionar, parecía que había olvidado hasta como devolver la amable sonrisa que me estaba proporcionando, me encontraba prácticamente inmóvil y con la vista perdida en ella.

Iba a hacer un gesto para responder y poder continuar nuestro raro momento ,si es que así puedo llamarle, pero una chillona voz me sacó de la burbuja.

—¡Luke!, ¿Donde te habías metido? ¡Ven a la pista, amo esta canción!—Torné la cabeza hacia la chillona voz y reconocí a la misma chica a la cual prometí una bebida hace rato.

Desorientado, devolví mis vista a la ventana, pero la pecosa chica ya no estaba. Un pinchazo de desilusión en mi pecho me removió.

La chica de la mesa, (Cuyo nombre nisiquiera sabia) me jaló hacia la pista de baile, adentrándonos en el mar de gente sudorosa y agitada. Los dos apestábamos a alcohol y estabamos bastante borrachos, así que no sabía del todo lo que estaba haciendo y me movía torpemente entre la gente.

Ahora sonaba la típica música de club, mucho ruido y poco sentido, música vacía.

La chica se movía animadamente contra mi, sonriéndome de manera seductora mientras mordía su labio. Yo sonreí con coquetería también. Ella respondió a mi acción con una risita chillona.

Coloqué mis manos en sus caderas y la apegué más a mi, mientras los dos nos mirábamos coquetos y ella tomaba mi cara entre sus manos para besarme de manera salvaje, aumentando la intensidad cada vez más.

Después de un rato bailando, ella habló:

—Sígueme, yo se a donde ir—Indicó ella sonriendo. Me sacó de la masa de gente y me guió a un lugar escaleras arriba, un baño para ser precisos. Cerró la puerta y le colocó el cerrojo para después abalanzarse sobre mi de nuevo.

—Sabes lo que haces, ¿No es así?—Dije en una burla, se notaba que la chica sabia lo que hacia por experiencia. Después de todo, ella parecía tener al menos unos 3 años más que yo.
—Siempre—Respondió con suficiencia, mientras se apresuraba a desabotonar con agilidad mi camisa.

Yo la tomé por la cintura y la puse a la altura del descuidado lavabo del baño, para después, continuar con lo nuestro, con el alcohol en nuestro cuerpo actuando por si solo.

/./

Bajé las escaleras con una mareo terrible. La chica se había quedado dormida en el baño, y cuando quise dejarla en un sillón me golpeo. Así que solo busqué a la otra chica con la que la vi para avisarle que su amiga estaba tirada en el sueño del baño y que fuera a buscarla o algo.
Ella estaba demasiado más pasada de copas que yo.

—¿Y Calum?—Pregunté una vez que llegué a donde estaban los chicos.
—Se fué con la chica de hace rato—Dijo Ashton encogiéndose de hombros.
—¿Y ustedes no han pescado nada?—Reí.
—Tengo novia amigo—Me recordó Ashton.
—Yo tengo hambre—Hipó Michael riendo tontamente, haciéndonos reír también.

Dirigí una última mirada hacia la fuente, con la esperanza de ver a la chica pelirroja que cruzó por mi mente en ese momento. Pero parecía que se había esfumado, de la nada y sin razón.

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V.I.P*:Está extendido el uso de los "pases o entradas VIP" de carácter gratuito y con frecuencia utilizados en discotecas, conciertos y otras actividades (por ejemplo presentaciones de productos o inauguración de nuevos establecimientos).

That Something. (EN EDICIÓN).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora