¿Área? ¿Laberinto? ¿Penitentes? ¿Larcho? ¿Calzones de corredor?
La llegada de Chuck es un golpe bajo para los habitantes del área, sí eran capaces de mandar a un niño de 12 años a un lugar tan horrible como en el que estaba encerrados no querían sab...
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¿Conocen ese sentimiento amargo? Si, ese que nace en tu mente, recorre tu pecho y termina dando náuseas en el estómago.
Claro, él los conocía muy bien.
Celos.
Esos que le gritaban en el oído, le formaban una mueca en el rostro, lo hacían fruncir el ceño.
Perdía la vista en las nubes de su mente, ¿Qué pasa si... .
-- ¡Newt! -- el grito de Thomas lo sacó de su realidad.
-- ¿Qué pasa, Tommy? -- preguntó confundido.
-- es hora de ir a dormir --
Al ver a su alrededor se encontró con todos sus amigos viendo, lo esperaban para irse. El apretón de su mano lo hizo ver a la chica de su corazón.
-- vamos -- le pidió.
Tan solo caminó siguiendo a todo el grupo, a su lado, Victoria iba de su mano, llevándose consigo muchas miradas molestas y envidiosas. Mientras enfrente caminaban Chuck y Sam sonrientes.
El pasillo por el que andaban parecía no tener fin, atravesaron muchas puertas más ninguna era la suya. Los guardias que los guiaba no tenían intención de detenerse, pero lo hicieron más pronto de lo que creyeron, pasaron la tarjeta por una pequeña máquina al costado y les dieron entrada libre.
Una sonrisa se formó al ver camas, literas. Minho corrió y dió un salto para llegar a la parte de arriba de una, quitándole el lugar a Winston que tenía la misma intención.
-- es cruel de tu parte, chino -- le habló algo molesto el carnicero.
-- ¡Ey!, solo mi amada hermana me puede decir así -- se defendió, y remarcó la palabra "hermana", gesto que no pasó desapercibido por la chica de nombre Victoria.
-- como sea -- dijo rendido el moreno.
-- podría acostumbrarme a esto -- exclamó Sarten.
-- yo igual -- volvió a hablar Winston, está vez ya estaba acostado en la parte de abajo de una cama.
-- ¿Podemos dormir juntos, mamá? -- preguntó Sam refiriéndose a él y Chuck.
-- claro, pero si en la noche se caen no va a ser mi culpa -- se burló un poco, sacando una pequeña risa de ambos.
-- oigan, yo... -- hizo una pausa algo inquietante -- buenas noches -- soltó para el final.
-- buenas noches, Thomas -- le respondieron.
La mayoría tomó sus sábanas, Disfrutando la cómoda sensación del colchón en sus cuerpos.
-- ¡Ah! -- exclamó Victoria cuando sintió un jalón que la hizo caer a una cama. Newt soltó una risa baja acomodando su cuerpo con el de ella, volviendo a jalarla cuando vió que se estaba por levantar.
