Can I Love You? (CANCELADA)

25

El ciclo escolar había empezado hace un par de semanas y MinSeok ya lo odiaba. De una u otra forma Woo-Je había logrado convencer a sus padres de abandonar el último año para así dedicarse completamente a su rol como aprendiz en la T1 Academy que aún no había dado inicio por algunas formalidades faltantes por resolver de su contrato y por ello, ya no contaba con su compañía en el instituto.

Allí estaba él, solo y siendo el blanco perfecto de las burlas de las cuáles era casi imposible pasar por alto; había logrado amigarse con una chica nueva de su clase que se sentaba a su lado y gracias a ella que suele ser mucho más valiente que él, le defendía cuando solían molestarlo.

—¡Ya llegó MinSeokie! —anunció aquella voz varonil que diariamente le gastaba bromas siempre que llegaba al aula de clase —¿Hoy no vino tu hermanito a acompañarte hasta la puerta?

—Cállate si no quieres que le hable al director —riñe la chica, levantándose de su asiento.

—¿Qué? ¿Acaso no puede defenderse solo?

—Y a ti qué te importa, imbécil.

—Déjalo Naeun —susurra MinSeok tomándola de la muñeca —, solo ignóralo.

—¿Cómo podría ignorarlo? —responde sentándose nuevamente de mala gana —Se la pasa soltando idioteces todo el día y todos los días.

MinSeok sonríe discretamente mientras saca los libros de su bolso. Las clases pasaron lentas, tanto que era casi una tortura. Odiaba estar ahí y más ahora que la razón por la cual era capaz de soportar aquellas horas ya no estaba, no podría ver a MinHyung a la hora del almuerzo ni de camino a casa.

Suspiró aliviado cuando sonó la campana que anunciaba el final de su última clase, empacó todas sus pertenencias en su bolso y espero a que su amiga hiciera lo mismo.

—¿Entendiste la tarea de matemáticas? —pregunta la chica, dirigiéndose a la puerta del aula.

MinSeok caminó detrás de ella, intentando recordar algún tema de la clase.

—Lo olvidé por completo —suspiró desanimado, dando paso a un puchero que lograba enternecer su rostro.

La jovencita soltó una carcajada. A veces entendía porque los chicos del instituto le tenían tanta envidia, ni intentándolo podrían llegar a ser tan adorables como MinSeok.

—MinSeok-ah, ¿te gustaría que hagamos los deberes juntos?

—Te agradecería un montón por ello, la verdad es que soy muy malo en matemáticas.

—No te preocupes —contesta colgándose de su brazo izquierdo —, te explicaré todo con lujo de detalles.

Naeun era unos meses menor que MinSeok pero lograba pasarlo por unos cuantos centímetros y era la chica más alta de su clase, podría decirse que era bonita aunque no sabría decirlo con exactitud, nunca se había fijado en esos detalles cuando se trataba de alguien que no fuera MinHyung. Aunque era nueva en el instituto, ya había hecho algunos otros amigos pero normalmente ella prefería pasar su tiempo con él, tal vez solo porque se sentaban juntos, suponía MinSeok.

—¿Vamos a algún café para hacer los deberes? —sugiere ella una vez estuvieron fuera del instituto.

—Si quieres vamos a mi casa, estaremos más cómodos allí y no está muy lejos.

—Perfecto.

Ambos se encaminaron hasta el metro mientras conversaban de trivialidades y en menos de lo pensado ya estaban frente a la puerta de la casa de MinSeok, el cuál rebuscaba desesperadamente sus llaves en el bolso.