¹𝐒𝐓𝐀𝐘 𝐖𝐈𝐓𝐇 𝐌𝐄||𝐂.𝐇.[✔︎]

♧ 𝗦𝗧𝗔𝗬 𝗪𝗜𝗧𝗛 𝗠𝗘 𝟮𝟰

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𝗦𝗧𝗔𝗬 𝗪𝗜𝗧𝗛 𝗠𝗘 || 𝗰𝗶𝗻𝗰𝗼 𝗵𝗮𝗿𝗴𝗿𝗲𝗲𝘃𝗲𝘀

𝟮𝟰

[𝗯𝘆 𝗰𝗲𝗹𝗲𝘀𝘁𝗲𝗵𝗮𝗿𝗴𝗿𝗲𝗲𝘃𝗲𝘀_]

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2004

Cinco Hargreeves:

Todo estaba de color negro. No sabía cuánto más duraría esto. Escuchaba una voz a lo lejos. Hasta que de repente escuché algo que me dejó atónito.

—Por favor, Cinco, te amo.

Era una voz lejana y en ecos, pero clara. Esas palabras hicieron un click en mí. Después de mucho tiempo, logré abrir los ojos y lo primero que vi fue a ella.

¿Acaso... acaba de decir que me amaba?

Cuando ella me miró, después de estar sorprendida, una enorme sonrisa se formó en su rostro. Sus ojos le brillaron.

—¡Grace! ¡Pogo! ¡Cinco despertó! — exclamó mientras se dirigía a la puerta.

Grace y Pogo entraron corriendo a la habitación. Pogo le pidió a Ocho que se retirara y obedeció.

Estaba alterándome un poco, aquel respirador que tenía me estaba sofocando.

—Tranquilo, cariño— sonrió Grace y me quitó el respirador con cuidado.

—M-mamá— susurré débilmente.

—No haga esfuerzo, joven Cinco, acaba de despertar de un coma— informó Pogo.

Aquello no me importaba, quería ir con Ocho a preguntarle por qué dijo eso. Necesitaba saberlo.

—Te haremos unos exámenes, ten paciencia— dijo Grace sonriente.

Asentí. Seguramente nos íbamos a tardar, por lo que ir con Ocho debía esperar.

Reginald se apareció en la clínica. Su expresión estaba seria. Parecía como si no le importara el hecho que había despertado. ¿Qué podía esperar de él?

—Buenos días, número Cinco— saludó.

—Buenos días, Reginald— saludé.

—¿Cuál es su estado? — le preguntó a Grace y a Pogo.

—Avanzó bien. Los medicamentos funcionaron y, al parecer, sus heridas ya sanaron. Sus pulmones están empezando a sanar, pero estará bien.

—Gracias— dijo y se retiró de la clínica.

Después de hacerme los exámenes restantes, ambos coincidieron que ya estaba bien y sólo tenía que hacerme revisiones de vez en cuando. Dijeron que podía hacer todo a la normalidad, incluyendo utilizar mis poderes.

—Tu cuerpo reaccionó bien— sonrió Grace —tendrás un poco de tos y dificultades para respirar, pero es normal debido a los daños que te hizo el humo del incendio. Te haremos revisiones en la mañana y en la noche, al igual que te daremos medicamentos.

—Está bien, ¿puedo irme a mi habitación? — pregunté con un poco de desesperación.

—Claro— asintió la rubia —sólo ten cuidado, pues tus pulmones y tu cuerpo aún están un poco delicados. No queremos que recaigas.