🛡️⁴🛡️

3.6K 389 27
                                    

Jungkook tenia en sus manos una pequeña caja de madera rasgada y maltratada por el tiempo, madera delgada que con un solo azote podía romperse.

En su interior solo había una bolsa y dentro de ella está lo que a Jungkook más le dolió ver.

Las cenizas de su pequeña cachorra que jamás logro conocer. Aquella cachorra que ahora es un pequeño angelito.

Los análisis sobre las cenizas y de Jimin ya habían salido ¿Pero ya para que leerlas?  Era demasiado obvio, pero aún así me dolía ver en aquella hoja el 99.9 de compatibilidad.

Regrese a la mansión, Hoseok me llevo y con ellos también las cosas de Jimin , en el camino en ningún momento solté esa cajita pequeña.

Y no quiero hacerlo, es la única manera que puede cargar a mi niña , mi cachorra, mi bebé.

Esa noche al llegar a la mansión, fui directamente a mi recamara, coloque las cenizas en mi escritorio y me aleje de ellas y las mire de lejos.

Mi cabeza me dolía demasiado por llorar toda la tarde, pero es que no puedo evitarlo.

Me odio, mi lobo me odia y Jimin también debe odiarme.

¿Qué es más doloroso que eso?

No lo sé y no quiero saber.

Me tire al suelo a llorar nuevamente , es lo único que se hacer bien, llorar como idiota por todas las estupideces que he hecho.

-¡¡¡ AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH!!!— Di un grito al aire para poder desahogarme — Quiero que todo termine ya. . .... Ya no puedo con esto. . .. … No quiero seguir así, Mi jimin, mis cachorros, mi cachorra. …. .

Abracé mis rodillas aún tirado en el suelo, seguí llorando y maldiciendome, siento que me estoy volviendo loco.

Que no puedo continuar más.

De repente escucho unos pequeños golpes en la puerta, lo ignore porque mis empleados sabían que si eso hacía no tocarían más, pero nuevamente se escucharon, un poco más fuertes.

—Hoseok si eres tú por favor déjame solo, no me siento bien.

Y nuevamente los mismos toques.

—¡ Déjeme solo acaso no entienden  ¡

Pero nuevamente tocaron, me levanté furioso, ¿Acoso están jugando con mi paciencia?

¿Quién se creía tan gracioso para molestarme?

Abrí la puerta con fuerza, pero no había nadie frente a mi. Pero unos pequeños toques en mi rodilla hicieron que bajara mi vista al suelo.

Mi cachorro, mi pequeño Minguk era el que tocaba.

Al mirar su rostro inocente, no puede evitar imaginarme como seria su hermana, ¿Se parecería mucho a mi? O ¿A Jimin? Porque Minguk se parece mucho a mi con unos pequeños rasgos de Jimin, entonces podría ser que mi cachorra se hubiera parecido Jimin.

—¿Cómo llegaste aquí ?— le pregunté con lenguaje de señas  y el solo me señaló su pequeña nariz de botón.

La misma naríz de mi Jimin.

—Ya veo . … .

Minguk me extendió sus pequeños manitas para que lo cargará, no me sentía bien, pero la llegada de Minguk a mi recamara logro calmarme un poco.

Lo cargue como el bebé que es y el se acurrucó en mi pecho, chupando su debo.

Sabía que significaba eso, cuando Minguk se chupaba el dedo era por qué quería leche y con mis ojos aún rojos y dolor de cabeza, salí de mi habítacion rumbo a la cosina.

🛡️¿Dónde estás jimin?🛡️🛡️ Kookmin 🛡️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora