WINDY SPRING X

CAPITULO 16

Taehyung apartó la vista de la ventana cuando escuchó a Seokjin moverse. El hombre había estado durmiendo durante las últimas horas, recuperándose de una cirugía en su pierna. Había tenido suerte. La bala no había golpeado nada vital, pero Seokjin todavía necesitó cirugía para cerrar la herida. Taehyung había estado esperando que se despertara desde entonces.

Caminó hasta la cabecera de la cama y agarró la mano de Seokjin, inclinándose sobre el hombre. Cuando las pestañas de Seokjin comenzaron a revolotear, Taehyung ahuecó el costado de su cara. —Ey, ¿cómo estás?

Los ojos de Seokjin se movieron por la habitación por un momento antes de volver a posarse en la cara de Taehyung. —Sediento —susurró Seokjin.

Taehyung se acercó y agarró el vaso de agua en la mesita de al lado y acercó la pajita a los labios de Seokjin. —Sólo un poco —dijo—. Puedes tener más cuando el médico te haya visto.

—¿Estás bien? —Seokjin preguntó después de que Taehyung apartara la pajita y dejara el vaso.

—Estoy bien. —Taehyung sonrió. —Voy a ir a buscar a la enfermera. Vuelvo ahora mismo.

—¿Qué le pasó a Wonho? —Seokjin preguntó antes de que pudiera alejarse.

—El comisario se lo llevó. Después de que lo vieran los paramédicos, el comisario se lo llevó a la cárcel. Será trasladado a la cárcel de la ciudad en espera de juicio por intento de asesinato. —Había un montón de otros cargos, pero ese era el que probablemente iba a mandar al hombre preso por varios años.

La mano de Seokjin se apretó sobre la suya. —¿Seguro que estás bien?

—Lo estoy. —Taehyung se inclinó y presionó un beso en los labios de Seokjin. —Estoy increíblemente bien.

—Se acabó.

Taehyung asintió. —Se acabó.

Tzuyu y Wonho ya no iban a estar en su vida. Todavía quedaban algunas cosas con las que tenía que lidiar, como el funeral de Tzuyu y el juicio de Wonho, pero lo más importante, las dos personas que habían hecho de su vida un infierno durante los últimos tres años se habían ido.

—Entonces, estaba pensando...

Seokjin levantó una ceja. —¿Oh?

—Quiero vender mi casa. —Taehyung se mordía el labio inferior mientras miraba a Seokjin. Se estaba aventurando aquí, no era algo que hubiera hecho en mucho tiempo, y su estómago se retorcía con nerviosismo. —Esperaba que tal vez te gustaría ayudarme a elegir una nueva. Tzuyu y Wonho no consiguieron hacerse con todo el dinero. Todavía puedo encontrarnos una buena casa.

—¿Sí?

—Quiero decir, si quieres. —Taehyung no sabía lo que haría si Seokjin no quisiera vivir con él. ¿Tal vez podrían salir?

—No lo sé —dijo Seokjin lentamente. —¿Vas a hacer de mí un hombre honesto?

La mandíbula de Taehyung cayó. —¿Quieres casarte?

Seokjin suspiró. —¿Me amas, Taehyung?

—Sí —respondió Taehyung sin dudarlo. No era como si tuviera que pensarlo. Amaba a Seokjin. Era tan simple como eso.

—Tú me amas y yo te amo. Eso significa que tenemos que estar juntos.

—Sabes, para ser un rudo motorista, seguro que tienes una vena romántica en ti.

—Sé lo que quiero.

—¿Y me quieres?

Seokjin se rio sin responder y alcanzó a Taehyung, tirando de él hacia la cama de hospital. Taehyung apoyó la cabeza en el pecho de Seokjin. El latido constante del corazón del hombre era tranquilizador como nada más podría ser. Seokjin estaba a salvo y vivo, y eso era mejor que cualquier cosa.