WINDY SPRING X

CAPITULO 13

Seokjin acarició la suave piel del brazo de Taehyung. Los moretones se habían desvanecido de su piel en los días transcurridos desde que Seokjin lo rescató, dejando tras de sí una impecable piel sedosa. Seokjin tenía la necesidad de acariciar cada centímetro, pero no lo hizo. Dejó dormir a Taehyung.

Estaba bastante seguro de que ver a Taehyung dormir se convertiría en uno de sus pasatiempos favoritos. El hombre parecía tan inocente cuando dormía, tan sereno. Había una paz en sus rasgos faciales, como si todas las preocupaciones del mundo real se desvanecieran mientras estaba dormido. Cómo alguien podría siquiera considerar lastimar un alma tan hermosa estaba más allá de la comprensión de Seokjin.

Taehyung era el tipo de persona que sólo debería ser tocada por manos suaves. Debería ser amado y protegido, y sólo expuesto a la bondad en el mundo. Y Seokjin odiaba el hecho de que cuando Taehyung despertara, tendría que traer maldad al mundo de Taehyung. El hombre había estado tan agotado la noche anterior, que Seokjin no había tenido corazón para contarle sobre Tzuyu y lo que habían encontrado en la caja fuerte.

Seokjin se apoyó en su codo, descansando la cabeza sobre su mano. Estaba impresionado con lo cómoda que era la cama. Era mejor que su propia cama. Regresar a la cabaña después de enterarse de que Wonho sabía dónde estaba, no había sido una opción. Habían aceptado la invitación de los Kang y se quedaron en la hacienda.

Taehyung había dudado al principio, pero Seokjin lo había convencido de que quedarse era lo mejor. Ambos necesitaban un lugar seguro para descansar y recuperarse. Con el señor Kang y un par de sus hijos custodiándolos desde la planta de abajo, Seokjin estaba bastante seguro de que estaban más que seguros.

Seokjin sintió el momento en que Taehyung se despertó. El pecho del hombre se expandió mientras respiraba profundamente. La sonrisa instantánea en el rostro de Taehyung hipnotizó a Seokjin. Estaba feliz, lleno de alegría. Era una buena vista en el hombre.

—Buenos días —murmuró Seokjin.

—Seokjin. —Los ojos de Taehyung se abrieron, la felicidad de su sonrisa se reflejó en sus ojos.

—Hola, cariño. —Seokjin acarició con el dorso de su mano el arco del pómulo de Taehyung. —¿Cómo has dormido?

—Sorprendentemente bien.

Seokjin sonrió. Abrió la boca para responder cuando sintió que algo le rozaba el muslo. La respiración de Seokjin se detuvo cuando se dio cuenta de lo que era, y luego sintió una dureza como respuesta en su propio cuerpo.

—Cariño, quiero hacerte el amor. —¡Por favor di que sí!

—Está bien —respondió Taehyung sin dudarlo, su sonrisa cada vez más grande. Eso era suficiente para Seokjin.

Seokjin se metió entre las piernas de Taehyung y se deslizó hasta la parte inferior de la cama. Agarró las mantas y las arrojó a los pies de la cama. Después, agarrando los pantalones del pijama de Taehyung, se los bajó por las piernas y los arrojó sobre su hombro. Sus ojos nunca dejaron los de Taehyung mientras lentamente bajaba entre sus muslos hasta que su cara estuvo al nivel de la gruesa polla orgullosamente de pie en atención. Maldita sea, era hermosa también. No tan larga como la de Seokjin, pero bastante grande en sí misma. La cabeza estaba hermosamente redondeada con una base gruesa.

Nunca habiendo dado una mamada antes, Seokjin se preguntó brevemente si podría estar a la altura. Finalmente tenía la oportunidad de hacerle el amor a Taehyung y no quería arruinarlo. Quería que fuera perfecto. Lentamente sacó su lengua y dio tímidas lamidas a su miembro. No está mal, un poco picante y salado pero nada que no pudiera manejar. Recorriendo su lengua en la parte superior encontró la pequeña hendidura allí.