Usopp sabía que algo iba a cambiar hoy, no sabía qué era. Pero su madre siempre lo llamaba su instinto marino. Le contaba historias sobre su padre, y cómo éste también tenía algo parecido que le llamaba al mar y le decía cuando los vientos cambiaban de dirección para acercarles a una nueva aventura.
A pesar de no recordar a su padre, Usopp declaró que quería ser pirata desde muy pequeño. Su madre se lo había tomado a risa, con orgullo en los ojos al saber que su hijo estaba imitando a su padre de la mejor manera posible. Dado que Shanks se estaba haciendo un nombre, esperaba que su hijo también encontrara una tripulación tan increíble como la del pelirrojo.
Sin embargo, cuando ella cayó enferma, Usopp empezó a molestar en la ciudad. Gritando sobre piratas invasores cada vez que necesitaba atención que ella no podía darle ahora que estaba postrada en cama. Se convirtió en un problema, ya que la gente dejó de creerle después de unas cuantas veces de que sucediera sin ninguna consecuencia real.
Ella había intentado hablar de ello con Usopp, pero como preadolescente que era, él no estaba muy dispuesto a escucharla cuando le contaba cosas así. Quería explorar y no estar preocupado por su madre enferma.
Después de una de sus charlas, se fue furioso. Dejándola sola en su casa para esperar hasta que él volviera, ya fuera con la cena de Kiko -su vecino- o con una creación propia (no siempre tan buena) hecha con mucho cariño, que ella comía sin problemas.
Cuando la puerta volvió a abrirse, Bachina se sorprendió al encontrar a su marido allí de pie, con los ojos clavados en su forma en la cama. La tristeza se apoderó de él de una manera que ella había esperado no ver nunca. Para asegurarse de que él no supiera que ella había caído enferma mientras él estaba en el mar, siguiendo la llamada, como ambos la llamaban.
"Yasopp".
Bajó la espalda y se acercó: "Bachina, yo... no sabía que estabas tan enferma".
Ante la extraña formulación de su frase, ella miró al hombre con el que se había casado. Mirando con los ojos muy abiertos mientras él le contaba una historia sobre el segundo Rey Pirata y el Deseo que hizo al One Piece y lo que les trajo. Cuando Yasopp mencionó que su hijo también tuvo mucho que ver en todo esto, Bachina no pudo reprimir un sollozo al saber que su hijo ganaría un gran Nakama si lo escuchaba bien. Usopp merecía eso, merecía un Nakama que atravesaría el fuego por sus compañeros.
"¿Es feliz?"
Yasopp asiente: "Por lo que sé, lo estará. De hecho, probablemente recordará el momento en que me vea, ya que así es la cadena de acontecimientos que hacen que la gente recuerde. Todos recordamos después de ver a Luffy, pero alguien más recordó al ver a Shanks".
Bachina asintió ante eso, esperando que Usopp apareciera pronto. Esperaba que estuviera bien y no se metiera en problemas mientras una tripulación pirata de verdad atracaba en sus costas.
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Usopp sabía por qué su madre le había dicho que no gritara tanto sobre los piratas que invadían su aldea. Llegó un momento en que la gente ya no le iba a creer, lo que lo convertía en algo peligroso para cuando ocurriera algo de verdad y ninguno de ellos le creyera.
Era casi como el cuento del niño que gritó 'viene el lobo', hasta tal punto que la única vez que hubo un lobo cerca nadie le creyó y el lobo pudo hacer de las suyas. Usopp no quería ser como el niño del libro, pero no sabía qué más hacer. Mamá ya no era capaz de entretenerlo como antes, y ninguno de los otros niños tenía ganas de jugar con él, ya que su padre seguía siendo un pirata.
Por eso miraba con ojos muy abiertos el barco atracado en el puerto. Era la bandera de la tripulación de la que le había hablado su madre, la tripulación a la que se había unido su padre.
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Forever and a Day, A Nakama Fanfic (Borrador)
FanfictionLlegó a Laugh Tale, se hizo con la corona, sólo para que Sakazuki convocara una Buster Call en la última isla. Akainu estaba dispuesto a hacer todo lo posible para detener la Era de la Piratería, matando a diestra y siniestra en su búsqueda de la ju...