Capítulo 16: Helmeppo y Nami

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Helmeppo necesitaba tiempo para asimilar lo sucedido, era muy consciente de que había sido un mocoso la primera vez. Pensaba que como su padre era capitán de la marina y no era muy amable con los que se suponía que dirigía, podía salirse con la suya en todo lo que quisiera.

Había necesitado tiempo con Coby y con Garp para ver que la forma de actuar de su padre no era la forma en que se suponía que debían actuar los marines. En todo caso, debían proteger a los inocentes y asegurarse de que ciertos piratas no pudieran dañar a la población en general. Antes se había creído a sí mismo, y a los marines en general, por encima de esos civiles normales.

Su padre siempre había actuado así, aprovechando su título para hacer lo que le viniera en gana sin pensar en las consecuencias. Como los marines encargados del Grand Line tenían demasiadas cosas que hacer, las revisiones eran inexistentes. Garp pasaba por allí una vez al año, o casi, pero nunca se quedaba mucho tiempo (algo que Helmeppo sabía ahora, tenía que ver con el capitán que estaba a las afueras de la base).

Entrando en su propia habitación, recogió las tres espadas que encontró allí, pensando que era un imbécil por querer quedárselas.

Suspirando, recogió las espadas y se dirigió al exterior para ver a su padre enfurecido al ver a un par de adolescentes allí de pie como si él no importara (y no importaba, ya no).

"Toma, Zoro".

Arrojando las espadas, tuvo que sonreír al ver cómo el primer oficial de los Piratas Sombreros de Paja tomaba sus espadas. Acomodándolas en su postura favorita mientras Luffy se encargaba de las vainas. Siempre había admirado el vínculo entre capitán y primer oficial, la forma en que ambos parecían ser capaces de comunicarse sin usar palabras. 

Su padre, no, el capitán Morgan miraba hacia donde él estaba de pie en los escalones de la base, una mirada ilegible en sus ojos que en algún momento habría hecho que Helmeppo se acobardara y se escondiera. Pero ya no, era uno de los pupilos de Garp el Puño, un comandante en SWORD y un verdadero marine.

"Helmeppo".

Burlándose de la forma en que su padre intentaba que cumpliera sus órdenes, se dio la vuelta y se dirigió hacia Coby. Disculpándose con la niña que seguía de pie detrás de su mejor amigo. Le explicó que no sabía lo que había estado haciendo, y si ella sería capaz de perdonarle por lo que había hecho.

Rika, pues así se llamaba, parecía contemplarlo. Escondiéndose detrás de Coby de una forma que le decía que no confiaba mucho en él.

Sonriendo a Coby, levantó la vista cuando un pie pesado intentó abrirse paso hacia ellos. Sólo para ser detenido por Zoro interviniendo, sus espadas listas y una sonrisa sedienta de sangre en su rostro. Ni Coby ni Helmeppo tenían miedo de ver morir a Morgan aquí, Luffy le había dicho a su primer oficial que no matara al capitán marine. Con eso bastaría siempre.

"Helmeppo, vuelve aquí o te arrepentirás".

Burlándose una vez más mientras miraba a su padre, Helmeppo se limitó a negar con la cabeza. No se atrevía a decir nada, por miedo a revelar demasiado. A pesar de que su padre había sido un marine horrible, también era consciente de que, una vez que pasó por las lecciones de reforma, el capitán Morgan era uno de los mayores partidarios de Sakazuki. Estar allí al final de todo, como una de las pocas personas que no murieron mientras el almirante de la flota se perdía ante la justicia definitiva.

Al oír el choque del hacha de su padre contra las espadas de Zoro, Helmeppo se volvió hacia Coby: "¿Cómo te ha ido? ¿Con todo lo que está pasando?".

Coby suspiró, antes de mirar a Luffy, que sonreía mientras vigilaba a Zoro. "Ha sido duro. Especialmente esos primeros momentos después de volver. Todavía recuerdo cómo acabó todo la última vez, y el caos total que se extendió con la pérdida de tanta gente."

Forever and a Day, A Nakama Fanfic (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora