Desperté y estaba en el claro del bosque. Intenté apartarme, pero Rey me tenía bien sujeta.
-¿Dónde cree que va sra. Grand? - dijo con voz ronca.
-Voy a ver a mi madre. - besó mi hombro.
- Vamos, nena- él se puso de pie y me tendió su gran mano. La tomé y con mucho cuidado, debido a mis cuatro meses de embarazo, me puse de pie. La verdad es que en todo este tiempo, ya no dolía tanto la muerte de papá.
Rey me había ayudado mucho. Su presencia. Sus abrazos.
Él.
Había llegado a la conclusión de que ya no sabía que sentía.
Ya muy poco me acordaba de Logan. Eso me preocupaba.
Ya sobre mis pies, recogimos las mantas y con un brazo de Rey sobre mis hombros, caminamos hasta mi casa.
Estábamos por llegar, cuando vimos a Maggie. Fui hasta ella y la abracé.
-Hola- ella se rió. Y me apretó más contra su cuerpo.
Ahí lo sentí. Ella estaba embarazada.
Tenía dos meses, tres semanas, seis días y cinco horas con tres minutos y treinta y cinco segundos.
Un bebé totalmente sano al igual que totalmente Dark.
Era hijo de Drapher.
Sonreí.
Tenía esa hermosa habilidad de conocer la data de algo con mucha precisión.
Logan podía curar, y yo detectaba el estado de salud de las personas. También me había dado cuenta de que mi estado de ánimo, influía mucho en el de los habitantes de la manada y el de Logan en el del clima.
Con razón hacia mucho frío y los días estaban grises.
-Un bebé- susurré y ella se apartó de mi. Se le veía resignada.
- Me lo hizo saber hace dos días, está feliz por alguna razón- bajó la mirada. Admiré su vestimenta. Era gris con bordes en rojo fuego.
Ella era hermosa.
-¿Embarazada? - preguntó Rey, se le veía molesto y a la vez culpable. Sabía como se sentía. Entendía que no quisiera preguntarle como había sido concebido. Me había dado cuenta de lo mucho que sufría Rey por lo que pasó entre nosotros.
Lo escuchaba pedirme perdón muchas veces en las noches. Sus recurrentes pesadillas.
Sus hermosos ojos me miraron suplicantes.
- ¿Él sabe que estás aquí? - ella negó. Rey suspiró.
-No quiere que tenga contacto con ustedes... dice que ni tu ni Tatiana, son mis hijos. Está celoso- admitió.
-Tu eres mi madre le pese a quien le pese- dijo Tatiana. Estaba vestida con una bata. Y pude percibir que ella tenía un mes de embarazo.
Contra todo pronóstico no me sentí mal. Era justo que él tuviese su familia.
Él aplazó estar con ella por todo el tiempo que le fue posible. Pero ya no lo pudo evitar. Tenía cosas que cumplir.
Por lo que sabía, ella lo perseguía sin descanso todos los días no sabía muy bien como era la relación entre ellos, pero creo que él no era feliz.
Dicen que los hombres sólo se enamoran una vez...
Vi a Rey abrazar a su madre y besar su rostro.
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Sólo para Mi.©
Hombres LoboSilver, era una chica muy tierna y también discriminada por su tono de piel. Como siempre tratando de evitar los problemas, no se mete con nadie, pero todos se meten con ella causándole mucho daño. Rey, era el Alfa de la manada, el chico popular y...