"Existe una serie de mitos y rumores sobre la conexión entre gemelos, que únicamente ellos pueden comprender, que están estrechamente unidos, incluso al hablar sin la necesidad de articular palabra, esto para nosotros fue algo un poco diferente, pue...
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-No entiendo a Tom, dice que él nunca se enamora y que tiene todo siempre bajo control pero como seguro ya está borracho me mandó un mensaje que era para alguna de sus chicas. -Le quité el teléfono a Georg para leer el mensaje, una parte de mí se molestó pero otra parte aún tenía la esperanza de que el mensaje fuera para mí.
-Dile que llame. Que le llame a la persona con la que se quiere disculpar. -En este punto estaba ebrio otra vez pero no olvidaba el enojo con mi hermano.
-¡Sí, sí, sí!- dijo el chismoso emocionado. -Si ella está aquí sabremos quién es la que lo tiene como un tonto. -Georg reía porque no imaginaba a Tom enamorado y menos desesperado por el perdón de alguien.
Cuando envió el mensaje a mi hermano, pasó un minuto y mi teléfono comenzó a vibrar en mi bolsillo, era él, me alejé de Georg haciéndole la seña de que volvía en un minuto y contesté.
-¿Qué quieres Tom? -respondí enojado mientras encendía un cigarro pero con el corazón acelerado por confirmar que el mensaje sí era para mí.
-Quiero que me quieras de nuevo, no te enojes. Bill, por favor. -definitivamente no sonaba sobrio
-¿Ya te fuiste con alguien? Te vi con varias mujeres tomando. -Podía verlo a lo lejos, pero obviamente pretendía que no era así.
-Bill, escúchame. Toma algo conmigo y hablemos, en serio que necesito que me creas y sobre todo que me quieras como yo a ti. -El pobre Tom se escuchaba desesperado.
-Pues no sé cuánto me quieras y por qué es tan necesario que te perdone. -Dije siendo lo más soberbio que pude.
-Porque te amo, me sentí celoso. Me porté como un estúpido y no quiero que estemos enojados, especialmente en nuestro día. ¿Por favor?
-Tráeme otra bebida, no quiero cerveza. Y sorpréndeme con algo más. -Esta era una pequeña señal de que quería dejar el pleito atrás pero necesitaba que Tom sintiera un poco de lo que yo siento cada vez que él deliberadamente me cuenta sobre lo que hace con otras personas.
Finalmente cuando Bill aceptó el vaso con whisky que le llevé y el porrito que Andreas me acababa de regalar, supe que estaba dispuesto a arreglarnos, aunque fuera poco a poco. Así eran las cosas con él, pero como dije, no soportaba qué se alejara de mí, que quisiera a alguien que no fuera yo y que me despreciara.
Los pocos que quedamos en la fiesta estábamos todos en un círculo bailando, ebrios, intoxicados y algunos ambas cosas. Andreas se estaba quedando dormido en una silla, algunas chicas aun intentaban ganarse a Georg que también bailaba (gracias al cielo olvidó por completo el mensaje que le mandé por error o en su defecto, decidió ignorar el tema). Eran las 5 a.m. pero la música nos estaba llevando, me sentía contento, horas antes me fumé el porro que me trajo mi hermano, seguía borracho pero muy relajado, salí un momento del círculo y tomé la mano de Tom que estaba sentado fumando, lo miré un instante, me acerqué a su oído y le dije:
-Feliz cumpleaños, Maus, Ich liebe dich. -Tom entrelazó nuestros dedos, sonrió tanto que sus ojos se hicieron chiquitos, se levantó y me abrazó. A fin de cuentas no había algo de malo en que dos hermanos se dieran un abrazo.
En solo hora y media nuestros papás iban a ir por nosotros y seguíamos borrachos y drogados, entonces decidimos parar para que cuando ellos llegaran nosotros diéramos una imagen aparentemente aceptable.
En cuanto salieron los primeros rayos del sol saludamos a nuestros papás, los muchachos y yo subimos los regalos al auto y nos fuimos. Una media hora antes de esto la fiesta se había terminado y así en nuestro estado ayudamos a nuestros amigos a guardar algunas cosas, les dimos las gracias y tratamos de que Bill comiera algo porque se encontraba en un estado más que inconveniente, todos lo estábamos pero él estaba astral porque se había fumado todo el porro él solo y no había querido dejar de tomar, él decía que se sentía bien, pero era cuestión de tiempo para que los efectos de la combinación que tenía en la sangre aparecieran.
Sabía que mamá no iba del todo conforme al vernos así pero también sabía que por ser nuestro cumpleaños trataría de evitar regañarnos, especialmente porque el único que se veía fatal era Bill y no los dos. Ella era una persona muy libre de mente pero en ocasiones la lográbamos sacar de quicio.
Para animar un poco el ambiente durante el trayecto Gordon puso música y comenzó a charlar con mi mamá. Entonces Bill quiso hablar conmigo, nos dimos cuenta de que no nos iban a escuchar por la música y porque ya estaban muy metidos en su plática.
-Maus, necesito que sepas algo más.
-¿Qué hay que saber Bill?
-No quiero que te enojes, solo que me escuches.- Hablaba arrastrando un poco las palabras y con los ojos adormilados.
-OK, te escucho. -Imaginé que vendrían cosas que no me gustarían pero me esmeré tanto en convencerlo de estar bien conmigo, que tendría que responder con mucho tacto si quería seguir teniéndolo contento.
-El hermano de Annelise...
-¿Qué con él? No me digas que te hizo algo. -Me encontraba más que listo para molerlo a golpes si se había atrevido a hacerle daño a Bill.
-Nos besamos antes de que ella y yo termináramos. Varias veces. Me dijo que se estaba enamorando de mí. -La sangre me hervía pero mi cara seguía estoica.
-¿Qué más, Bill?
-Antes de Anneliese me veía con dos chicos de preparatoria por las tardes, algunas de las cosas que te conté las hice con ellos y no con mujeres. -Yo tenía mis sospechas y me las estaba confirmando con esto.
-OK, ¿alguna otra cosa? ¿Tuviste algún novio o novia importante que yo desconozca? ¿Hiciste otras cosas que no me hayas querido contar? -Me era difícil mantener el volumen bajo para no llamar la atención de nuestros padres.
-¿Te acuerdas cuando te dije que estaba estresado por mi examen de física y el proyecto de francés? -asentí y cerré los ojos un segundo, ya sabía lo que me iba a decir. -Es porque terminé con Derek, estuvimos juntos por dos meses y cuando sus papás se enteraron de que estaba saliendo con un hombre lo hicieron que terminara con la relación. Me sentía muy bien con él, solo que no me atreví a contarte porque creí que te ibas a enojar y esa fue la razón de que me la pasara de mal humor, llorara y saliera a escondidas a beber y que casi hace que repruebe. -Finalmente suspiró y trató de abrir un poco más los ojos para ver mi reacción.
-Sabía que estabas con alguien. -No pude evitar enojarme pero era un enojo vacío, celos por algo que no estaba pasando ya. -La verdad sabía que a Derek le gustabas, pero no imaginé que en realidad llegarían a algo. Pensaba que ibas a las prácticas del equipo a verme a mí. -Seguía serio y hubo una larga pausa en silencio. Bill seguía viéndome con esfuerzos.
-Sí, me enamoré. Ya sé que me quieres preguntar eso Tom, pero jamás he amado a alguien más de lo que te amo a ti. -Todo esto lo dijo murmurando y yo supe que ya no había manera de cambiar nada. Y realmente no estaba en posición de exigir exclusividad si yo siempre había sido un tremendo cabrón.
Me acerqué a Bill y el recargó su cabeza en mi hombro mientras lo abrazaba y acariciaba su largo y negro cabello. Se durmió el resto del camino y por el momento los dos nos encontrábamos en paz.
Miraba el camino rodeado de campo y algunas casas a lo lejos, luego admiraba a mi Bill, hermoso en todo momento, ni siquiera me cuestionaba si estaba mal amarlo de ese modo.
