Todos habían entrado al cuarto del espacio de gimnasia, después de pasar por muchos problemas.
Una vez que estuvieron a salvo y respiración tranquilos. Gyeong-su apretó el agarre de su mano.
Estaba feliz, Suni y él se encontraban a salvo.
─Gyeong-su, me lastimas. ─murmuró Ji-min.
El azabache la miró aterrado. ─¿Ji-min?
La respiración de Gyeong-su paró. Buscó por toda la habitación oscura a Suni.
─Cheong-san, ¿Dónde está Suni?
El nombrado paró su llanto, y se levantó preocupado.
─¿Dónde está Sun sun? ─murmuró el azabache sintiendo que su respiración empezaba a acelerarse.
Nadie respondió. Nadie sabía dónde estaba la castaña.
Gyeong-su se acercó a la puerta, pero Woo-jin lo paró.
─¿Acaso estas loco? ─demandó el coreano.
─Suni no está. ─respondió obvio. ─Debo ir a buscarla.
Cheong-san negó. ─Suni no pediría que arriesgues tu vida por ella.
Sin poder evitarlo, Gyeong-su empezó a llorar.
─Ella es la única por la que me mantenía vivo. Sin ella, vivir no tiene sentido.
Ji-min lo interrumpió. ─Nos tienes a nosotros. No arriesgues tu vida por ella. No es tan valiosa.
La situación solo empeoraba. Gyeong-su estaba desesperado. Se culpaba, ¿Cómo pudo dejarla sola?
Sin pensarlo dos veces, el coreano miró a su mejor amigo. Este entendió lo que quería hacer.
─Lo siento.
[...]
─¡Déjame! ─gritó desesperada tratando de safarse del agarre del matón.
Suni definitivamente se odiaba por haber abandonado a sus amigos. El hambre y la ansiedad le habían jugado una mala pasada.
Ahora se encontraba en un aula desconocida, junto a un zombie idiota.
Gwi-nam sonrió de lado. ─¿Sabrás igual que tu mejor amiga o más deliciosa?
Suni se quedó paralizada. El coreano apretó el agarre del brazo. Esta soltó una queja.
─Déjame. ─le reclamó harta. ─¿Por qué no jodes a otra persona?
Gwi-nam alzó la vista con su mirada aterradora.
─ Necesito hacer sufrir a tu amiguito Cheong-san. Le romperá el corazón ver a su mejor amiga infectada, ¿no?
─Eres un idiota. ─murmuró la castaña molesta.
Gwi-nam la agarró de la cintura acercandola más a él. ─Extraño tus labios sobre los míos.
Suni hizo una arcada. El olor a sangre que desprendía de su boca, le generaba ganas de vomitar.
─Deja de tocarme. ─tartamudeó asustada.
El coreano soltó una risita, que para Suni, sonó como las que los mortífagos soltaban mientras mataban gente.
─Antes no decías lo mismo. ─susurró mientras la acercaba cada vez más.
Gwi-nam agarró sus mejillas intentando besarla. Suni lo empujaba tratando de safarse de su agarre
Una flecha traspasó el brazo del coreano. Suni retrocedió asustada y vió a un chico con un arco y flechas en su espalda.
─¿Quién se atrevió a tirarme esto? ─preguntó Gwi-nam mirando para todos lados.
Suni corrió al lado del coreano que la habia salvado. Gwi-nam negó con la cabeza con una sonrisa plasmada en su rostro.
─¿Te estas haciendo el héroe, imbécil?─inquirió acercándose.
Suni lo jaló para atrás ya que no se movía.
─¿Por qué hueles igual que ellos? ─le cuestionó alzando su nariz hacia el coreano.
─Es muy raro y da miedo ─pensó Suni mirándolo con una ceja alzada.
─¿Por qué no me das mi comida y te vas tranquilamente? ─reclamó Gwi-nam.
─¿Acaso piensas que soy una comida? ─soltó indignada la coreana.
Gwi-nam pusó los ojos en blanco. El coreano suspiró mirando a los dos. ─Tengo ganas de matarte, eso iba a decir.
Gwi-nam se acercó rápidamente a los dos. Min-Jae miró a Suni.
─Ve.., ¡vete! ─exclamó en susurró. ─Yo estaré bien.
Suni negó. No podría dejarlo, él la había salvado.
─Ya estoy muerto. ─murmuró mostrando su brazo, lo habían mordido. ─Salvate, corre.
Suni le dió una mirada de disculpa, corrió hacia la puerta y salió.
.
.
.Tuve que leer toda la historia y ver ma serie de vuelta. Me quise matar, pero no pensaba empezar 2024 sin terminar la bendita historia jeje
ESTÁS LEYENDO
𝖨 H̶A̶T̶E̶ ˡᵒᵛᵉ 𝖸𝖮𝖴 | 𝖾𝗌𝗍𝖺𝗆𝗈𝗌 𝗆𝗎𝖾𝗋𝗍𝗈𝗌.
FanficD𝗈𝗇𝖽𝖾 𝖲𝗎𝗇𝗂 𝗍𝗋𝖺𝗍𝖺 𝖽𝖾 𝗋𝖾𝗉𝗋𝗂𝗆𝗂𝗋 𝗌𝗎𝗌 𝗌𝖾𝗇𝗍𝗂𝗆𝗂𝖾𝗇𝗍𝗈𝗌 𝖾𝗇 𝗆𝖾𝖽𝗂𝗈 𝖽𝖾 𝗎𝗇𝖺 𝖺𝗉𝗈𝖼𝖺𝗅𝗂𝗉𝖼𝗂𝗌 𝗓𝗈𝗆𝖻𝗂𝖾. ✧*:.。. ..̯ ᵕ̈ ִֶָ ☪︎* ☁︎. . * ✰ .· ☁︎ . 𝖣𝗈𝗇𝖽𝖾 𝖲𝗎𝗇𝗂 𝖾𝗆𝗉𝗂𝖾𝗓𝖺 𝖺 𝖽𝖾𝖿𝖾𝗇𝖽𝖾𝗋 𝖺...