Bonsoir Monseur ❁ HyunIn

♡ : CAPÍTULO XXI

Hyunjin sintió como aquella sensación de calidez le inundaba el pecho, junto con la armonía del silencio en la habitación, únicamente la respiración tranquila de Jeongin escuchándose a su lado, con una suave sonrisa mientras su cabeza estaba recostada sobre su pecho y sus piernas se encontraban enredadas con las propias.

Era la primera vez que despertaba con Jeongin, estaba viendo su cabello desordenado y su rostro tan tranquilo y descansado, con sus mejillas enrojecidas por el frío del aire acondicionado y las sábanas las cuales no eran lo suficientemente gruesas para mantenerlos a temperatura a ambos, tanto que tenían pretexto para apegarse lo más posible, claro, la sábana tenía que cubrir a ambos y no había mejor idea que dormir acurrucados para que pudiera cubriros lo suficiente.

Había tenido pensado pedir el desayuno a recepción antes de que el menor se despertara, pero no era posible ya que Jeongin le había dicho que a primera hora en la mañana iría a casa para hablar con su madre y Jungwon, sino era que Jennie ya había ido y les había contado lo ocurrido.

Hyunjin le había propuesto ir en ese mismo momento, llevarlo a su casa y arreglar las cosas antes de que Jennie llegara con la gran bomba, pero parecía haberse rendido, con su suave sonrisa fingida y sus dedos quitando cada una de sus prendas para tomar una tranquilizadora ducha. Había notado que no estaba bien, no cuando afuera del baño había escuchado los sollozos ahogados de Jeongin, cuando había salido del baño y sus ojos estabas ligeramente hinchados.

Había intentado hablar con Jeongin pero él había fingido de que todo estaba bien, que no había problema con lo que había ocurrido y fingiendo que no era la gran cosa. Pero Hyunjin sabía que ocurría algo más, pero no quería presionar a Jeongin para decirle, no si él no quería contarle.

Hyunjin respetaba su espacio, sabía que el hecho que era su novio no restaba que Jeongin podía tomar sus propias decisiones y guardar cosas para sí mismo, al menos mientras no tuvieran que ver con su relación y algo que fuera a afectar a ambos.

Y entonces allí se encontraban, Jeongin bostezando y abriendo sus ojos lentamente, con sus ojos sonrientes y su voz ronca por la mañana.

—Buenos días... — dijo Jeongin, para luego dedicarle una sonrisa a Hyunjin y acurrucarse aún más al cuerpo del mayor.

—Buenos días cariño. Estaba pensando en pedir algo para que lleves a casa, para que desayunes con Jungwon y tu madre.

—Mhn, sería una muy buena idea. —Jeongin se estiró para tomar el reloj de muñeca de Hyunjin y bufó cuando vio la hora. Era tarde, demasiado tarde.

Habían dormido en la madrugada por ver películas juntos, las cuales realmente no habían prestado atención porque estaban más cómodos platicando y riendo por las historias que Hyunjin le contaba de Beomgyu cuando era pequeño, o las que Sung le contaba sobre Jungwon cuando solía llorar porque Jeongin iba a la escuela y lo dejaba solo en casa con su madre.

—Creo que tendré que llevar algo para almorzar, realmente es tarde.

—Sí, yo tengo que hablar con Jennie y firmar algunos papeles para la custodia de Beomgyu, sigue siendo menor de edad después de todo. — vio como Jeongin se levantaba y caminaba hacia el baño, empezando a tomar el jabón y lavarse el rostro. — Luego iré a ver un departamento, no viviré toda mi vida en un hotel. — Jeongin rió.

—No olvides que cuando nos casemos quiero mi casa con un gran patio. —bromeó Jeongin buscando un nuevo cepillo de dientes que el hotel regalaba.

—Y no olvides los gatos. — Jeongin asintió y con una gran sonrisa cepilló sus dientes. — Creo que deberías llevar un poco de ropa a mi departamento, cuando lo compre. Digo, ya viviré solo y puede que algunos días te saque de casa para que duermas conmigo.