There's no way 【Haikyuu-SakuAtsu】

10. Se es valiente cuando se decide serlo

—Así que siempre sí eres una perrita encimosa, ¿no, Miya?

Atsumu separa los labios mientras suelta muy pesado el humo del cigarro que se está fumando. Está sentado en cuclillas en los escalones de la terraza que da a la piscina del jardín de Tooru, en el presente.

Dentro de sus humillantes memorias también separa los labios solo que lo hace separándose de los de Kiyoomi como si se quemaran apenas oye la voz de Iizuna cerca de ellos.

Mierda. Está sonrojado, con un poco de saliva escurriendo por sus labios, con los ojos vidriosos y con los hambrientos deseos de continuar pero ¿Qué-...? ¿Qué acaba de pasar?

Ah, sí. Se acaba de besar con Kiyoomi.

Se acaba de besar con Kiyoomi con un beso sabor a hamburguesa pero que ha sido todo menos inocente.

¿Qué ha pasado? Hace apenas minutos atrás estaban hablando acerca del futuro y de los planes que tenía cada uno. Kiyoomi le había dicho algo acerca de que era valiente por dejar que el viento guiara sus pasos por ahora, sin aferrarse a nada en concreto mientras intentaba hacer de todo y de pronto: ¡Pum! Él se lanzó sin más como un hambriento y desesperado hacia sus labios. ¡¿Por qué no se detuvo?!

El Atsumu de 9 años en el futuro se lleva de nuevo el cigarro a los labios, da una calada profunda. La garganta le arde, carraspea un poco. Dentro del recuerdo también se lleva una mano a la boca mientras tiembla un poco porque es un estúpido, es super estúpido, y como si de esa forma pudiera cubrir el delito que acaba de cometer.

Porque sí, para él eso era un delito.

Era un delito besarte con alguien que tiene una relación con otro alguien. Y aunque sabe que es cierto y que a Tsukasa no le cayó ni tantito bien desde que se integró a la banda y de que el sentimiento fue recíproco desde el día en el que Motoya lo llevó delante de ellos y lo presentó para que cubriera el puesto de mandadero, era muy diferente a que le valiera todo y simplemente se besara con Kiyoomi delante de él. ¡Estaban saliendo, puta madre!

No fue intencional que lo presenciara pero lo hecho, hecho estaba.

Se acababa de besar con el novio de alguien y-...

—Yo-... —Iizuna se acerca a él, pasa de Kiyoomi y se planta delante suyo. Atsumu piensa que le va a golpear, se lo tendría merecido, piensa.

Iizuna le lleva apenas un par de centímetros. Su expresión, sin embargo, lejos de ser la típica reacción esperada de alguien que acaba de atrapar a su pareja en pleno agasajo infiel, es extraña, casi como si lo inspeccionara y lo creyera poca cosa, junto al descarado brillo en sus ojos como si la situación también en lugar de molestarlo le causara placer. .

Todo eso con una mezcla de soberbia.

A Atsumu le incomoda aunque sabe que no está en posición de sentirse mal cuando él es quien acaba de cometer un acto deshonesto.

—¿Tanto te urge tener un pene entre las piernas y en el culo que tienes que besar lo primero que se mueva delante de ti? ¿Para eso te uniste a la banda? No recuerdo haber contratado una prostituta —le pregunta con descaro Tsukasa pero también con la intención de humillarlo.

Atsumu no dice nada, está tan rojo de la vergüenza como de la humillación que no se atreve a negarlo pero eso no significa que no quiera darle un golpe. Se siente tan mal pero en algún momento levanta el rostro esperando algún tipo de apoyo o intervención por parte de Kiyoomi.

No sabía en lo que estaba pensando.

Ni por qué había puesto su esperanza en alguien que tampoco tenía claro el panorama así como él.