15 - En El Paraíso VI

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Rafael se cubrió los ojos con las manos para protegerse del brillante sol de la mañana y así poder ver claramente los ojos de Mariana, su amor de juventud ahora parado frente a él. Aunque Mariana estaba vestida de manera más sencilla, con ropa de trabajo, emanaba una belleza y una seguridad que lo impactaban profundamente. Aquellos ojos lo miraban con intensidad, como si quisieran comunicarle mil cosas.

"Buenos días, Rafael," dijo Mariana suavemente, con una mezcla de alegría y nerviosismo.

"Hola Mariana", respondió él, su voz ligeramente temblorosa.

"Disculpa la intromisión. ¿Y la señora Alejandra?" preguntó Mariana, con una ligera preocupación en su tono.

Alejandra, escondida y escuchando, pensó con sarcasmo: ["¿Y qué quiere esta vieja ahora? ¿Saber si hay moros en la costa antes de atacar?"]

"Alejandra está descansando, quedo profunda después de lo de anoche," respondió Rafael

["¡Eso es lo que ustedes creen!"] pensó Alejandra, su interés y sospecha creciendo ante la situación.

"Quedé un poco preocupada y quisiera disculparme. No sé si fue un error enviarte una torta de cumpleaños, parece que a la señora Alejandra no le hizo mucha gracia la sorpresa," expresó Mariana, mostrando un toque de inseguridad.

["¡Ay, ahora es culpa mía?"] se preguntó Alejandra internamente, cada vez más irritada.

"No, no, no es su culpa. Usted no hizo nada indebido," aseguró Rafael, "Más bien, quedé impresionado de que se acordara de mi cumpleaños."

["¡Ay, pero cómo la defiende! Y qué impresión, no. La vieja lo deja plantado, se larga a la Conchinchina y luego se gana el cielo por acordarse de un vil cumpleaños, y regalarle una triste torta"] pensó Alejandra, cada vez más amargada.

"Mas bien le pido disculpas, Alejandra no suele a reaccionar así. Supongo que fue mas una cosa de tragos."

["AHH NO, ahora el señor me tilda de tóxica y borracha. Muy bien Rafael, siga ganando puntos."] Alejandra se sintió ofendida y malinterpretada, mientras escuchaba cada palabra detrás de la puerta.

"A menos, que..." dijo Mariana con vacilación, su voz denotando cierta inquietud, "que ella supiera lo que tuvimos hace unos años."

Rafael suspiró profundamente antes de responder, "Sí, Alejandra lo sabe. Yo le conté, porque no tengo secretos con ella."

["¡Claro que lo sé! Y me lo confirmaron con las miraditas que se dieron anoche!"] pensó Alejandra, escuchando con atención detrás de la puerta.

Al escuchar esto, Mariana sintió una mezcla de curiosidad y emoción. Pensó que, tal vez, la reacción de Alejandra había sido impulsada no por unos simples celos por una persona desconocida, lo que en su mente significaba que Rafael debió haber dicho o hecho algo que provocara esos sentimientos en Alejandra.

"Ay Rafael, hablando de lo que tuvimos...me arrepiento mucho. Por cómo termine las cosas entre nosotros. Nunca quise lastimarte. Estaba muy joven, inmadura" expresó Mariana con una voz cargada de remordimiento.

["¿Como así que arrepentida?"] Alejandra frunció el ceño, pero siguió escuchando.

Rafael, manteniendo contacto visual con Mariana, respondió con calma y comprensión, "Mariana, lo que pasó, pasó. Yo no le guardo ningún resentimiento.

Sumercé hizo lo que pensó que era lo correcto. No se juzgue. Viéndola ahora, creo que valió la pena," dijo Rafael, su tono lleno de entendimiento.

["Pero que compresivo me salió este desgraciado "] Alejandra no pudo evitar sentir una mezcla de sorpresa y algo de resentimiento al escuchar la respuesta de Rafael.

HQLPNS - Cuando Regreses a MíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora