𝐸𝑙 𝑆𝑖𝑔𝑛𝑖𝑓𝑖𝑐𝑎𝑑𝑜 𝐷𝑒 𝐿𝑎𝑠 𝐹𝑙𝑜𝑟𝑒𝑠 (H×H) |Kɪʟʟᴜᴀ × Lᴇᴄᴛᴏʀᴀ

𝗙𝗶𝘃𝗲.

—Wow... Eres increíble Gon. —Dijo asombrado Killua.

—¿A que te refieres? —Preguntó extrañado Gon.

—Solo es que cuando te escuché hablar con Palm, parecía que estabas justo en tu elemento.

—¿En serio?

—Mhm...

—Me resulta muy gracioso que Palm se haya obsesionado tanto contigo. —Dije divertida.

Estábamos los tres en el gimnasio. Conversábamos mientras realizábamos nuestra rutina.

—¿Sabes lo peor de todo? Es que acepto la cita para poder quedarnos en la residencia y al final terminamos viviendo contigo... —Suspiró Killua.

—¡Hey! Yo acepte la cita porque no cumplí con mi palabra y debía compensarselo de alguna u otra forma, no fue por conveniencia propia. —Corrigió Gon. —Además, no tengo ninguna problema en tener una cita con Palm.

—Te deseo suerte con eso, Gon. Palm parece ser una chica un tanto especial... —Recordé el aura sombría que inundó la residencia en el momento en que la pelinegra estaba un tanto exaltada. —Aunque tienes un encanto natural, así que no creo que te resulte complicado.

—¿Encanto natural? Me siento muy alagado, ____. Pero no sé a que te refieres... —Dijo confundido el moreno.

—Me refiero a que sabes como tratar a una chica, eres muy encantador y caballeroso aunque no te des cuenta. Yo diría que si no estuvieras tan centrado en entrenar serias un galán de primera. —Reí.

—¿Eso piensas? —Dijo un tanto sonrojado.

—¡Mhm!

—Hay algo que quiero preguntarte... —Dijo Killua.

—¿Hm? —Gon lo miró.

—¿Alguna vez has tenido una cita antes?

—Claro, muchas veces.

A Killua y a mi la respuesta nos cayó como un balde de agua fría. ¿Cómo era posible que Gon, el chico más inocente de los tres ya tuviera experiencia?

—Aunque la mayoría fueron con mi tía Mito...

—Ah... Ahora lo entiendo... —Expresó Killua.

—Espera... Acabas de decir "la mayoría". ¿Entonces las otras citas con quienes han sido?

—A veces llegaban barcos a Isla Ballena solo de mujeres. Y algunas solo querían salir con chicos más jóvenes. Yo les enseñaba la isla, y ellas me enseñaban cosas.

—¿Cosas? —Pregunté sorprendida.

El pelinegro asintió sonriente.

Con Killua nos miramos shockeados. ¿Gon tenía experiencia? Y experiencia de la verdadera al parecer...

—Que hay de ti, ____. ¿Has tenido alguna cita?

Dejé las pesas que estaba usando en el sueño y coloqué mis manos en mi cadera.

—Bueno... Siempre he estado muy ocupada entrenando...

—¿Entonces nunca has salido con nadie? —Me preguntó el albino.

Lo miré y me sonrojé levemente.

—No... Nunca... —Suspiré—. ¿Y qué hay de ti?

—Claro que no. Siempre he estado ocupado entrenando para ser un asesino, y he estado con Gon desde que me retiré.

—Pues somos del mismo club. —Reí. —¡Choca los cinco! —Extendí mi mano y coloqué mi palma en frente de su cara.

El albino me miró algo irritado, pero me correspondió y aceptó el saludo.