𝘕𝘦𝘸 𝘗𝘦𝘰𝘱𝘭𝘦

Falsedad

Narra Mia

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Sentí que todo mi cuerpo estaba ardiendo, la lengua me picaba y sentía que en mi cuello me estaban clavando agujas.

Me costaba respirar y escenas de todos los del grupo, incluyéndome a mi, papá y Alex, siendo caminantes... Abrí los ojos de golpe y me incorporé con la respiración agitada, una gota de sudor frío me recorrió la frente.

— Mia! ¿Estas bien? ¿Como te encuentras? ¿Que te duele? ... — empezó a preguntar Andrea, vi a Sophia en la esquina de al lado del baño mirando atentamente a donde yo estaba. No hizo nada así que respondí a Andrea.

— Estoy bien, ¿los demás están bien? — pregunté nerviosa por las imágenes que había visto.

— Claro, supongo, a Dale le duele un poco la pierna pero puede caminar normal. — respondió buscando en una caja de primeros auxilios.

— Ten. — me ofreció dos pastillas. — Una te quitará el dolor de cabeza, y la otra el dolor de la pierna. ¿Te duele algo mas? — las agarre y las metí en mi boca, le di un trago al agua y negué la pregunta que me hizo.

— De acuerdo. — la rubia me sonrió, intente levantarme rápido, pero, la pierna me lo impidió.

— No, no, no, ni se te ocurra, volaste por los aires hace un par de horas y te diste un fuerte golpe en la cabeza, mejor dicho, en todo el cuerpo, y tienes una herida profunda en la pierna. — dijo agarrándome de los hombros para que no me levantara.

bufé. — Está bien. — conteste y volví a tumbarme.

— ¿A donde nos estamos dirigiendo? — pregunté.

— Escogieron ir por la autopista y buscar o bien algún lugar nuevo para rehacer un campamento, o buscar un lugar seguro. — me explico.

— Ah, okay. — dije y freno de golpe la caravana cosa que hice que diera un pequeño bote. Solté un quejido.

— Joder. — dije tocando mis espalda.

— Dale no frenes así! — gritó Andrea.

— No soy yo! Está conduciendo Glenn! — contestó Dale.

— ¿Glenn a caso sabes conducir? — dijo Andrea sarcásticamente, T-dog rió.

— Si, rubia. —

Me levante poco a poco a lo que esta vez Andrea no se quejo, desde donde estaba pude ver como Sophia y Carol bajaban de la caravana acompañadas de T-dog y Glenn. Dale se acercó.

— ¿Como te encuentras? — dijo sonriendo.

— Bien, mejor que antes, ¿y tú? — respondí.

— Me alegro muchísimo de ello, yo estoy bien, caí en unos arbustos y solo me hice un poco de daño en la pierna, pero por lo demás estoy genial. — dijo.

— Si, te vi caer. —

— ¿Está despierta?, ¿A despertado? — dijo Carl entrando corriendo a la caravana. Al verme despierta se callo y su expresión cambio de ansia a sorpresa.

— Mia! — se acercó a mi a toda prisa y me abrazó, a lo que no pude corresponder ya que había varios motivos.

1. Seguía enfadada.
2. Me dolía todo.

Sonreí falsamente aunque intentando no demostrarlo. Aún que él lo entendió perfectamente.

— ¿Podéis dejarme a solos con ella? — dijo él.

— Claro, pero no tardes mucho que su padre y hermano querrán verla. — respondió Andrea.

Dale salió y después fue ella.