ˏˋ°•*⁀➷A veces la vida de un semidios no es tan buena como un simple mortal piensa, los dioses abandonan a sus hijos todo el tiempo, este es ese caso, a los hermanos Bonave pasaron por el abandono de su padre, la decepción de su madre tras diez años...
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Grace y Killah despertaron al mismo tiempo con el ruido de la campana que indicaba el desayuno. Ambos se despertaron y pusieron ropa cómoda para el día, pues hoy era captura la bandera, el juego en el que el grupo de amigos se dividía. Mientras que Killah y Clarisse estaban en el equipo rojo, Luke y Grace estaban en el equipo azul.
Grace se despabiló y salió de su cabaña, en la puerta se encontró a Luke, al que miró con confusión ya que este sostenía el collar que había portado la noche anterior.
—¿Luke? ¿Por qué tienes mi collar?- Dijo mientras cerraba la puerta detrás de ella y se acercaba a él.
—Lo perdiste ayer cuando te quedaste sola en el río, y hoy lo encontré tirado así que pensaba traerte mientras dormías.- Dijo y le dió el collar, haciendo que la chica sonriera por el detalle.
—Gracias Luke, ¿vamos?- Dijo poniéndose el collar en el cuello y bajando las escaleras para ir con Luke a desayunar.
Ambos se sentaron en la mesa de siempre, hoy Clarisse no iba a estar porque quería entrenar más antes del juego, al contrario de Killah, quien quería descansar antes de que empiecen a pelear. Luke y Grace se sentaron uno frente al otro para comer cuando llegó Chris para desayunar con ellos.
—¿Cómo está mi pareja favorita?- Dijo Chris sentándose de golpe al lado de Luke.
—Ya te dije que solo somos amigos y ya.- Dijo fríamente el de rulos a su mejor amigo con algo de sonrojo.
—No parecían eso ayer.- Dijo entre risas haciendo que ambos pusieran cara de confusión.- ¿Qué? ¿No se acuerdan?
—¿Acordarnos de qué?- Dijo Luke medio tartamudeando, ninguno se acordaba de lo que había pasado ayer.
—Del beso.- Dijo con total normalidad y tranquilidad, ambos se miraron algo sonrojados.
—¿Qué beso?- Dijo Grace ya nerviosa, ¿cómo no se iba a acordar de eso? Mejor dicho ¿Porqué su hermano no le había contado?
-El chico solo rió y la cara de confusión regresó a ambos— Debieron ver sus caras, no hubo ningún beso, al menos que nosotros viéramos.- Dijo y ambos chicos se tranquilizarnos y siguieron comiendo.
La hora de la ofrenda ya había llegado, Luke se levantó con su comida y le dijo a la menor que viniera con él. Al terminar eso, ambos se fueron a buscar a Clarisse para verla practicar y hablar un rato con ella.
—Te hará mal no desayunar.- Dijo Grace mientras se sentaba en el pasto y Luke traía algo de comida.
—Desayunar es para débiles.- Respondió fríamente y siguió entrenando.
Luke llegó y se sentó al lado de Grace y apoyó su cabeza en sus piernas, como de costumbre, la chica empezó a jugar con el cabello del chico y este cerró los ojos, mostrándose relajado ante esa acción. La castaña lo miraba hipnotizada, por más que lo intentara, no podía sacar la vista del chico, pero tuvo que hacerlo, pues su hermano estaba viniendo, y no le gustaba que mirara tanto a los chicos, en especial a Luke.
