Once

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La semana pasó lentamente cuando noté que Billy me estaba evitando. Se saltó la mayoría de las clases que tenía conmigo y salió rápido del estacionamiento antes de que pudiera alcanzarlo. Empecé a sentirme triste y a pensar que había cambiado de opinión al volver por mí. Quizás ya ni siquiera quería ser mi amigo. Fruncí el ceño ante la idea.

El viernes, después de la escuela, le dije a Steve que tenía que correr a la biblioteca y que él podía irse a casa. Por suerte, no pensó en ello y me dejó ir. Nadie sabía que en realidad iba a casa de Billy. Iba a descubrir lo que hice.

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Llegué a la casa de Billy en poco menos de veinte minutos y miré nerviosamente su Camaro azul vacío. Estaba en casa. De repente comencé a sentirme un poco enfermo. Billy podía ser una persona mala y grosera, y no estaba segura de querer estar cerca de él cuando tal vez estaba enojado conmigo.

Dudablemente llamé a la puerta mientras escuchaba la débil música rock que sonaba desde adentro. Hubo algunos gritos hasta que la familiar pelirroja abrió la puerta y me levantó las cejas.

"¿Qué?" Su tono grosero me tomó por sorpresa y me dejó tartamudeando.

"Yo-uh, es... necesito-"

"¡Max! ¿Quién es?" La voz áspera de Billy resonó desde el interior. La niña, Max, suspiró y se hizo a un lado permitiendo que Billy me viera. Apareció a la vista y sacudió la cabeza con irritación. Max puso los ojos en blanco y se alejó.

"¿Qué deseas?" Billy se apoyó contra el marco de la puerta y cruzó sus musculosos brazos. Mis dedos juguetearon entre sí mientras evitaba sus ojos.

"¿Por qué me ignoras?" Levanté la vista para ver sus ojos mirándome. Después de unos segundos, suspiró y cerró la puerta detrás de él.

"¿Qué te hace pensar que lo hago, cara de muñeca?" Me sonrojé ligeramente ante su apodo común.

"¡Es obvio! Ni siquiera me miraste en la escuela y te saltaste todas las clases que tenemos juntos. Sólo quiero saber por qué...". Se pasó una mano por el pelo desordenado y sacó un cigarrillo.

"Por qué lo que hago no es asunto tuyo, cariño. Te sugiero que te mantengas al margen". Exhaló el humo y miró ligeramente a los coches que pasaban.

"Entonces, ¿no estás enojado conmigo?" Se podía escuchar un atisbo de esperanza en mi voz. Sus labios se apretaron formando una fina línea y miró con más fuerza. Lo miré nerviosamente y retrocedí un poco ante su expresión.

"Te veré el lunes...". Parecía como si estuviera discutiendo mentalmente consigo mismo antes de cerrar de golpe la puerta principal.




---Nota de la Autora---

¡Hola, chicos! Quiero conocer un poco mejor a mis lectores y quiero que ustedes tengan un lindo apodo. En mi otro libro, los llamé "nuggets".

¡Comenta qué apodo te gustaría y de dónde eres!

--Nota Traductora---

Me parece muy tierno el apodo <3

Yo la verdad nos les puse un apodo

¿Cuál les gustaría?

No se olviden que tengo más traducciones en mi perfil. Besos ♡♡♡

Innocent - Billy HargroveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora