Innocent - Billy Hargrove

Veinticuatro

"¿Qué demonios?"

Una criatura gris de aspecto viscoso emergió de entre los arbustos haciendo que un jadeo aterrorizado saliera de mi boca. Podía sentir como Billy intentaba hacernos retroceder lentamente, así que le seguí la corriente.

"Cuando te diga que corras, empieza a correr tan rápido como puedas". Billy me susurró.

"¿Hacia dónde?" Se tomó un segundo para pensar en la dirección, luego asintió con la cabeza hacia la izquierda.

"1, 2, 3, ... ¡corre!" Billy y yo salimos hacia la izquierda. El sonido de la criatura que nos seguía sólo nos hizo acelerar el paso. Como yo no estaba en forma y Billy era prácticamente adicto a hacer ejercicio, le resultaba mucho más fácil correr. Mi ritmo se estaba ralentizando rápidamente y la criatura era cada vez más rápida.

Billy estaba a unos cuantos metros delante de mí y de vez en cuando miraba hacia atrás para asegurarse de que yo seguía allí. Hizo un giro brusco a la derecha y no dudé en seguirle.

Miré nerviosamente a mi espalda y vi a la criatura más cerca que nunca. Mi pie resbaló bajo una rama caída y me preparé para la caída y para ser devorada. Un aullido salió de mis labios y Billy se giró inmediatamente para ver qué había pasado. Al instante, se dio la vuelta para ayudarme.

Billy me puso en pie y agarró la rama que me había hecho tropezar. Me agarró con fuerza y golpeó al animal, que emitió un chillido de dolor. Billy repitió el movimiento hasta que vio que sangraba y estaba inconsciente. Aparté la mirada de la escena, esperando a que Billy me dijera que se había acabado. Con cautela, eché un vistazo por encima de mi hombro y lo vi arrodillado junto al animal, con las manos tocando el cuerpo con la rama.

"¿Billy?" Se levantó y lo miró fijamente.

"Nunca había visto uno de estos". Dejó caer la rama al suelo y se acercó lentamente a mí.

"Yo tampoco. ¿Podemos irnos ya?" Billy se rió un poco al oír mi tono asustado y asintió.

"Sí. Aunque hay un problema. Estamos en medio del bosque". Al parecer, llevábamos corriendo más tiempo del que pensábamos. En todas las direcciones a nuestro alrededor sólo había árboles.

Empezamos a caminar en una dirección aleatoria, mirando detrás de nosotros cada pocos minutos para asegurarnos de que el animal estaba realmente muerto.

"Más vale que mi bebé esté bien..."

"¿Qué fue eso?" Interrumpí la perorata de Billy sobre su coche y me quedé quieta. Billy enarcó las cejas mientras escuchaba.

A lo lejos se oía un aullido muy débil, o múltiples aullidos.

"¡Eso es lo que oímos cuando estábamos con Jonathan!". Golpeé ligeramente el brazo de Billy para llamar su atención.

"Bueno, vienen de esa dirección, así que iremos por aquí". Billy puso su mano en la parte baja de mi espalda y me guió por otro camino.

"Nunca debí salir de mi casa...". Murmuraba en voz baja cuando un aullido muy cercano llamó la atención de ambos.

Otra de esas terroríficas criaturas salió de entre los arbustos y de nuevo me vi arrastrada detrás de Billy.

"Otra vez no..."

-Nota Autora-

Perdón por la espera, las clases han vuelto a empezar.