𝗞𝗠𝗦 ❘ 𝗌𝗎𝗇𝗃𝖺𝗒

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❝I want to kill myself❞

━ Sonríe, solo sonríe. No digas nada. Todo esta bien, mira a la cámara, respira. CALMATE.

Esas palabras se repetían en la cabeza de Sunoo una y otra vez mientras el entrevistador cuestionaba sobre el reciente comeback del grupo y los demas se limitaban a responder cuidando cada palabra para no caer en malentendidos.

Con suaves pasos hacia atras, Sunoo trataba de esconderse entre los demás para cubrirse del foco de las cámaras y ser captado en primer plano lo menos posible. Las inseguridades y los malos comentarios se apoderaron de su cuerpo y mente, sus delgadas piernas comenzaron a temblar, su tez tomo un color más pálido y empezó a sudar más de lo normal, ni siquiera él podía entender sus propias acciones, las voces en su cabeza se intensificaron.

Kim se sentía mareado y abrumado, los sonidos a su alrededor comenzaron a alejarse y su cuerpo se sentía debil; estaba apunto de desplomarse cuando sintió una mano en su cintura qué evito su desmayo.

—Estas bien? —

—Sí, gracias Jay Hyung —Respondió regalándole una de sus falsas sonrisas qué fue perfeccionando a lo largo del tiempo.

—Preparen sus cosas chicos, nos iremos en unos minutos —Mencionó una de las managers

Sunoo se levantó de su lugar mientras el resto empacaba o jugaba en sus celulares, sintió un fuerte dolor de estomago asi que se dirigió al baño, estuvó un largo rato frente al lavamanos intentando calmar su dolor posiblemente causado por el estrés o por el hambre que lo asechaba desde hace días.

Mientras su ocupada mente pensaba en la causa de su malestar, su cuerpo cometio un grave error...

Mirar hacia el frente

Se topo con el espejo y se observó reflejado en el.

━ Qué mierda es eso?! Eres horrible- pensó Kim. Podía notarlo, sus mejillas eran más grandes, había subido de peso, sus ojos, esas asquerosas ojeras causadas por el insomnio, esa boca reseca, sus hombros, su cuello...poco a poco la imagen del espejo comenzó a deteriorarse frente a la vista del poseedor de aquella silueta.

Su mente no podía centrarse en una sola cosa, los pensamientos diambulaban por ahí, la culpa, el odio, todo lo negativo hacia acto de presencia.

Ah, y claro...

La entrevista, la maldita entrevista, la había arruinado con su simple presencia, todos lo odiarian por eso, no dijo ni hizo nada malo, pero lo presentía.

Rápidamente sus mejillas se llenaron de lágrimas, cubrió su boca con su mano en un inútil intento de callar sus sollozos, el dolor y la presión qué estuvo cargando todo el día fue liberado.

━Deja de quejarte, no fue un día tan malo si lo comparas con otros- se repetía eso constantemente hasta que su cerebro se lo grabara para autoconvencerse de que solo estaba exagerando.

–Sun? Tenemos que irnos– se escucho del otro lado de la puerta.

Poco tiempo después Sunoo salió del baño, no tenía los ojos hinchados ni había un solo rastro de su llanto, sus habilidades para esconder eso y más sentimientos habían mejorado.

Sus compañeros lo estaban esperando con una calida y sincera sonrisa, que no era percibida así por Sunoo.

Nadie sabía cómo se sentía, sería egoísta si se enteran e intentan ayudarlo, al menos eso es lo que pensaba.

Salieron del hotel en donde se encontraban y subieron al auto para dirigirse a su próximo destino, Kim sacó sus audífonos y colocó música en su celular para ir escuchando en el camino, no se percató de unos ojos qué se clavaron en él, una mirada de fuerte preocupación, del único que parecía entenderlo.

Sun cerró los ojos y suspiró, había algo peor que sufrir? Sí, sufrir en silencio.