TWENTY

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—Su Majestad, si usted me sigue, le mostraré el
salón. Lord Plag...uh, Jungkook, Lord Jungkook está
reunido con el Rey Namjoon y el Rey-Consorte Seokjin en este momento, pero Jeffers les informará que usted llegó tan pronto como ellos terminen. —Thomas al menos así creía Taehyung que el hombre dijo que se llamaba, entregó el sombrero y los guantes a un pequeño hombre que llegó en silencio a su lado.
— Rickles lleva a los guardias a que coman algo.

«Lord Plaga». Una sonrisa se formó en los labios de
Taehyung a pesar de sí mismo. El apodo le decía que era de una manera cariñosa. No era para nada sorprendente, todo el que conociera a Jungkook… Aunque la verdad el nombre le había molestado un poco al principio. Galaxias, Taehyung sabía que había sido una plaga desde que se fue.

—Está bien. — Taehyung asintió hacia los dos guardias armados, dándoles su permiso. No le parecía que fuera a encontrarse con un asesino que no fuera Jungkook. Taehyung hizo un guiño al ver a los guardias seguir a Rickles, entonces giró su atención de regreso al mayordomo. — Gracias, Thomas.

«Finalmente». Después de un infierno de nueve días, iba a ver a Jungkook. En camino a Regelence había logrado hablar con Doyoung quien le dijo que Markham estaba bien seguro, detenido pero que aun no había señales de Jong-Dae. Eso solo había aumentado la necesidad de Taehyung de tener a Jungkook. Jong-Dae no parecía que fuera a regresar a Regelence, pero con Markham en custodia, la IN podía empezar a sospechar de todo. Por alguna razón Taehyungestaba convencido de que si Jungkook estuviera con él, Jungkook estaría mejor protegido, incluso aunque sabía que no era cierto. La fría realidad de la situación es que quizás Jungkook no lo necesitaba.

Las siempre presentes mariposas que había tenido
desde que Jungkook lo dejó se intensificaron con sus dudas y preocupación. Nunca había sido un hombre de dudas, pero quizás nunca había tenido algo tan importante en riesgo. Ese era un extraño sentimiento. Uno que particularmente no le gustaba, pero… «¿Qué si Jungkook se rehusaba a regresar a casa?» No, no iba a pensar de esa forma. Taehyung iba a hacer lo que fuera para llevar a Jungkook de regreso con él. Se rebajaría, rogaría, suplicaría… cualquier cosa. Y si no funcionaba él lo secuestraría. Eso probablemente anularía la alianza con Regelence, pero teniendo a Jungkook no le importaba.

Cuando Taehyung vio alrededor se encontró
impresionado y extrañando a Jungkook incluso más. Ese lugar era Jungkook. Era hermoso. Sólido, poderoso y masculino con sus paredes de piedra y colores oscuros. Si no fuera por las comodidades modernas, Taehyung podría jurar que habría sido construido hace milenios. El lugar obviamente se ajustaba a lo que le gustaba y disgustaba a Jungkook, porque el palacio Hollister bajo la dirección de Jungkook, estaba comenzando a ser una semejanza de él. Con algo de suerte, con el tiempo ellos le llamarían hogar al palacio cuando estuviera terminado.

Mientras ellos pasaron del corredor a una gran área, el corazón de Taehyung cayó al suelo y regresó de nuevo. «Kook»

Ahí al pie de una gran escalera estaba Jungkook de
espaldas a Taehyung.

Taehyung se quedó sin aliento. Maldición, Jungkook estaba a la vista de sus hinchados ojos. Usaba una chaqueta gris clara, unos pantalones gris oscuro y botas de montar. Sus hombros se veían distintos. ¿Estaría haciendo ejercicio? realmente le dolía el pensar que Jungkook hiciera ejercicio sin él, pero ese sentimiento era minúsculo en comparación al alivio de ver a Jungkook de nuevo.

Sin pensarlo, Taehyung se encontró yendo hacia
adelante. Pero justo antes de tocar a Jungkook, se congeló. ¿Qué si Jungkook no quería verlo? ¿Qué si él..?

Taehyung envolvió sus brazos alrededor de Jungkook, enterró su cara en el cuello de Jungkook he inhalo.

Jungkook se tensó.

THE ENGLOR INCIDENT  ⌱  TAEKOOK  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora