Solos (Peter Parker)

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Desde que tengo memoria Peter ha estado siempre para mí y viceversa, cuando mi mamá murió estuvo para mi sosteniendo mi mano y tratando de hacerme sentir mejor, cuidaba que comiera y veía que tomara mis clases con regularidad.

Fue lo mismo con el cuándo su tío Ben falleció no pude alejarme de él me quedé mucho tiempo en su casa ayudando a la tía May también, mi padre lo entendió ya que él había hecho exactamente lo mismo con nosotros.

Después de tantas cosas que hemos pasado juntos no creo que pueda ser capaz de decirle como me siento y arruinar todo, él era todo para mí.

Porque qué pasaría si el solo me ve como una amiga o como una hermana, nos hemos diche infinidades de veces te quiero, pero nunca ninguno de los dos sabemos el trasfondo.

De mi parte ese te quiero es más que el para un amigo, pero que hay del de él.

- Ya me voy pa. - grite desde la puerta

- Me saludas a Peter! 

Alcance a escuchar desde el piso de arriba.

Dios apiádate de mí, que voy a hacer si hoy le confieso todo a mi mejor amigo y después nunca jamás me vuelve a hablar, como le iba a explicar a mi papa que su amigo de comics ya no nos hablaría más.

Y es que Peter logro que toda mi familia lo adorara.

Llego al departamento y cuando estoy a punto de tocar la puerta esta se abre, dejando me ver a una tía May muy arreglada con un vestido morado que resaltaba su cabello castaño.

- Linda, que bueno que llegaste. - me saludo con un abrazo metiéndome al departamento. - Peter se está bañando no creo que tarde mucho en salir, pero les deje varios números en el refri por si quieren cenar algo.

- Muchas gracias May, yo lo espero aquí.

- Claro linda, diviértanse. - me termino de decir guiñándome el ojo y cerrando la puerta detrás de ella.

Me senté en el pequeño sillón se la sala, esperando a que Peter saliera y ver que haríamos hoy. Siempre hacíamos planes tranquilos íbamos a museos, o al cine a veces simplemente ordenábamos comida y veíamos series.

Estaba tan centrada en mí misma, tratando de reordenar mis ideas como iba a empezar, el clima se veía como que no tardaría en llover. Como me iría a mi casa si me rechazaba, siempre me quedaba aquí cuando teníamos planes.

Mi angustia era tan palpable que ni siquiera note a Peter hablándome desde la puerta de su cuarto.

- Ey, madi... - ya estaba a mi lado tratando de descubrir porque no le escuchaba.

- eh... Ah si, hola. - me levante enseguida y lo abrace un poco me costaba bastante estar así de cerca con él.

- Esta todo bien peque? - me pregunto tratando de captar mi mirada.

Y este era una de las razones por las cuales estaba tan enamorada de él, sabía perfectamente cuando algo no estaba bien.

Me sorprendía a veces que él podía conocerme más que yo misma.

- Si pete, todo bien. - dije casi en un suspiro derrotada no sabía si iba a poder perder todo esto solo por mi fantasía que cree que el me ve de la misma manera.

Camine junto con él a su cuarto para empezar a planear que peli veríamos hoy.

- Que te parece una de miedo?

- Si, solo que no tenga mucha sangre o tripas porque yo quiero comer a gusto.

Soltó una risita y asintió, mientras el buscaba la peli yo estaba encargando la cena ya tenía el número del chico de las pizzas de tanto que pedíamos en el mismo lugar.

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