En medio de dos mundos

Manos a la obra

Tiro de su cabello repetidamente, mientras las lágrimas se deslizaban por sus mejillas.
¿Por qué dolía tanto?
Se secó bruscamente las lágrimas con el dorso de su mano. No, no iba a llorar por eso Nico se lo había buscado nunca debió decir eso. Enserio la había lastimado. Negó levemente con la cabeza.
Basta-se dijo-no voy a pensar en ese tema
Respiró hondo, iría con Leo. Leo siempre necesitaba ayuda, la desviaría del tema un tiempo. Se levantó y se duchó otra vez, estaba desastrosa; tenía el pelo revuelto y nudoso, sus ojos estaban hinchados y quedaban rastros de lágrimas secas.
                                     *
Con una toalla se envolvió el cuerpo y con la otra se secó el pelo dejándolo caer en suaves ondas. Caminó hacia el armario y se vistió con unos tejanos azules y una básica blanca. Se miró al espejo; había corregido sus ojos con base y con rímel, su pelo estaba recogido en un moño con pequeños mechones rebeldes sueltos,  pasó brillo labial ligeramente por sus labios. Respiró hondo antes de tomar la perilla y abrirla. Debía de ser la hora del almuerzo, puesto que no había nadie. Camino apresuradamente hasta el linde del bosque y se sumergió en el. El bosque era, sin duda, su lugar favorito del campamento; le encantaban sus gruesos troncos y como se torcían hasta adquirir una forma alucinante, además, era bastante silencioso por lo que, normalmente, iba a pensar ahí. A lo lejos divisó la puerta del búnker 9, era imposible de pasar por alto, una gran puerta de metal reforzado se alzaba a mitad del bosque. Tocó la puerta con sus nudillos, unos segundos después se encontraba con el hijo de Hefesto sonriéndole abiertamente.
- Hace cuanto no te veía pequeña pulga
Vale, era enana... Pero no era para tanto
-¡Leo!- sonrío- me preguntaba si necesitabas ayuda en el búnker
Leo sonrío aún más (si eso era posible)
-Siempre necesito ayuda- le hizo ademán para que pasase- trabajo en un nuevo proyecto
-¿De qué trata?- preguntó entrando al taller- ¿te ayudo con eso?
Al entrar encontró varias mesas de trabajo con planos y un mapa del campamento mestizo. Según Leo era de por lo menos doscientos años de antigüedad, ya que se utilizó por primera vez en la Primera Guerra Civil Mestiza y en algunas ocaciones desde entonces.
-Claro que puedes ayudarme- señaló un gran plano abierto en la mesa de trabajo más próxima que tenía- es un proyectil que se utilizó en la Segunda Guerra Mundial cuando América bombardeo Alemania
Jennifer abrió los ojos
- ¿ Va a disparar?
Leo la miró ofendido
- Nunca, y repito, nuca les daría algo que disparase, los hijos de Ares  lo usarían en mi contra de seguro. No, respondiendo a tu pregunta no dispara solo recrea imágenes de la guerra si aprietas esta inscripción- respondió señalando unas letras en cursiva azules- saltan las imágenes de diversas guerras
No tenía palabras. Leo era un genio, aunque no todo el tiempo.
-Wow
El morocho hizo pose se diva dejando una mano en su cintura y la otra apoyada en su hombro
-Lo sé
-¿Qué hacemos?
-Pues crear el disco duro para que proyecte las imágenes - lo dijo como si fuera lo más obvio del mundo-va a tardar un buen rato
-Eso es justo lo que necesito en estos momentos-murmuró.
-Manos a la obra