NUESTRA LUZ DE LUNA LLENA

Capítulo 1

ASHLEY
"Así estamos, cada uno en su orilla, sin odiarnos, sin amarnos, ajenos."
-Mario Benedetti

Me estaba retocando los últimos detalles delante de mi enorme espejo, me daba igual si pensaban que era una egocéntrica o narcisista por hacerlo. Ahora que me encantaba lo que el espejo reflejaba, no me lo iba a esconder.

Iba elegante con un vestido de seda rojo que se ajustaba a cada curva de mi cuerpo, ya no era una inseguridad mostrarlo. Ya no me encogía en mí misma cuando llamaba la atención con colores atrayentes.

Sonreí de medio lado al acabar de maquillarme. No me había maquillado mucho, era bastante simple, solía picarme todo tipo de maquillaje.

De hecho, solía negarme a trabajar con empresas que obligaban a sus modelos a maquillarse y fingir que son perfectas y que los rasgos naturales como el acné no existen. Es decir, me negaba a enseñar una versión irreal de la realidad y trabajaba con empresas que representaran la variedad real. Modelos con diferentes tonalidades de piel o con diferentes tipos de cuerpo. Quería empresas naturales, que contratara modelos de todo tipo para que la gente se pudiera sentir identificada con cada una y tuvieran una representación. Intentando no generar más inseguridades.

De golpe, mi móvil sonó, avisando de que alguien me había enviado un mensaje.

Pensé que sería de Dariel, mi mejor amigo, con el cuál había quedado para ir juntos a la gala.

Pero me sorprendió ver un mensaje de Alexia. Hacía tiempo que no hablaba con ella.

Cogí el móvil para leer el mensaje pero enseguida la pantalla cambió a una llamada.

-¡Alexia! -respondí con una gran sonrisa ya que aunque nos distanciamos seguía siendo igual de importante para mí.

-¡Ashley! ¿Cómo estás?

-¿Muy bien y tú?

-Bien, bien... Oye que te he llamado porque mañana llego a la ciudad y por si querías que nos veamos...

Hubo un silencio en el que sabía que detrás de la línea, Alexia estaba pensando cómo decirme lo que estuviera pasando por su cabeza.

Ella destacaba en eso, siempre fue de esas amigas que decían la verdad en la cara y esa vez no fue menos:

-Matthew tiene un sparring por la tarde... Podríamos ir a verlo y luego ir a cenar...

Me quedé en silencio.

Matthew.

Hacía tiempo que no escuchaba su nombre.

-Si bueno...ya veré, ya te diré...

Y sonó el timbre de mi casa.

Salvada por la campana, literalmente.

-Si, ya me dirás.

-Bueno tengo que irme... -me apresuré a decir dirigiéndome a la puerta

No muy convencidas nos despedimos rápidamente y mientras colgaba, Dariel entró por la puerta. Con su sonrisa habitual, esa alegre que me parecía tan preciosa.

-Hola bonita -me besó suavemente la frente

-Hola -sonreí

Dariel era de esas personas que te hacen dudar de su realidad. A veces me preguntaba si era alguna especie de ángel o algún ser fuera del planeta porque ser un simple mortal se le quedaba corto.

Tenía una forma de amar muy pura, muy única.

Intentó amarme a mí, pero yo no era como él, él me conoció cuando yo era incapaz de querer a alguien.