capítulo 16

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Capítulo 16.

Los días pasaron, y los viajeros tomaron por costumbre nuevas actividades.

Raisa había empesado a trabajar con sus pociones, y aunque no se le daban bien, Caelan siempre la ayudaba a arreglar sus herrores.

si tienes paciencia lo lograrás -le decía.

El se había vuelto su sombra desde que lo salvó de su hermosa prisión. Le había contado que sintió ganas de perseguir a una ardilla que saltaba entre los árboles y por eso terminó rodeado de girasoles.

No se ceparaba de ella nunca, y Raisa lo agradecía. Para ella, Caelan era algo así como su hermano mayor.

Circe, Uriu y Venjamín, se pasaban la mayor parte del día en la biblioteca desde que el japonés sugirió la idea de aprender el cunebris, el idioma antiguo de Faeri, se habían vuelto muy unidos, y la compañía de Circe hacía que Venjamín no fuera tan tímido como antes. Uriu pensaba que era mejor que no tener nada de que hablar con el, porque su constante cilencio comensaba a irritarle.

Por otro lado, Araline se pasaba la mayor parte del día en la habitación de Gladius. Le leía y charlaban sobre la actividad de el palacio.

Esto contribuyó a el restablecimiento de el hobbit, ya que la compañía le agradaba mucho.

es solo un tonto hobbit -solía decirle Elwin a su hermana.

y tu muy incensible -le responddía Araline.

Su amor era naturalmente incomprendido, pero tenía la esperanza de que algún día el hobbit podría corresponderla.

Arlo y Zéphiruz solían dar paceos matinales juntos. A lucía le parecía verdaderamente extraordinaria la conección entre el hobbit y el dragón. Parecían caballo y jinete, sobre todo porque Zéphiruz cambiaba cada vez más de humor a medida que el tiempo pasaba.

Lucía volaba junt o a ellos de vez en cuando, aunque el dragón siempre le sacaba ventaja. Ella amaba mirar sus alas plateadas a la luz del sol, porque parecían estelas brillantes.

Esa mañana, todos estaban reunidos en el salón, y discutían lo que harían en el día.

Las princesas habían decidido darle un descanso de sus clases a Raisa, para que se despejara un poco.

creo que se a donde vamos a ir hoy -dijo Lucía entusiasmada

¿puedo ir yo también? Tengo ganas de salir a caminar -dijo Gladius

si, claro. Te hará bien tomar aire fresco -respondió Caelan.

¿y tu que harás? -preguntó Lucía a las dos elfinas

yo iré con mamá. No tengo ánimos para mezclarme con gentes inferiores -le respondió Elwin

FAERI. LIBRO 1: UN VIAJE A LO DESCONOCIDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora