ONLY RIVALS // TAYNICK // TAYLOR ZAKHAR Y NICK GALITZINE

20 - Culpemos a la gripe

TAYLOR

Ni siquiera los deportistas de élite se libran de una gripe. Así que Nick no iba a ser menos.

Nick había pasado en cama los últimos tres días con una gripe leve pero que le había dejado el cuerpo machado y como resultado, se había perdido el último partido. Y ya llevaba dos. Estaba insoportable.

Además, en esos tres días pude comprobar realmente lo mal enfermo que era: se quejaba por absolutamente todo, no me dejaba ayudarle en nada y para colmo se llevaba el día gritando "me quiero morir".

Lo único bueno durante esos tres días que Nick estuvo en cama con cuarenta de fiebre fue que Pez desapareció por casa por miedo a enfermarse y yo pude cuidar tranquilo de él, sin tener que fingir que no me preocupaba en absoluto.

- No necesito un enfermero - dijo de mala gana.

- Por supuesto que no.

Le iba colocando paños empapados en agua muy fría para ayudarle a bajar la fiebre además de la medicación que le habían dado en la enfermería del campus cuando su móvil comenzó a vibrar.

- Nick, es tu madre.

- No lo cojas.

- Pero es tu madre...

- Pasando.

Dos horas más tarde, la fiebre había conseguido bajarla de cuarenta a treinta y ocho y de nuevo..

- Nene, tu madre te está llamando de nuevo.

- Joder, seguro que ha sido Lexi la que se ha chivado.

- ¿Lo cojo?

- Te he dicho que n...

- Hola, buenas.

No podía seguir haciendo oídos sordos al teléfono de Nick mientras esa mujer, que quisiera o no era su madre, llamaba para preguntar por él. No podía evitar pensar en mi madre y lo mal que lo pasaría de ser yo quien no le cogiera el móvil.

Nick abrió sus ojos como platos en cuanto me escuchó hablar, pero no me dijo nada.

- ¿Nick?

- No, soy... un amigo de él.

Nick cerró sus ojos con fuerza. Estaba enfadado pero me daba igual.

- ¿Está mi hijo contigo?

- Si señora. Aquí a mi lado.

- Me ha llamado su hermana para decirme que tiene la gripe, ¿es así?

- Si señora. Pero ya está mejor, la fiebre está bajando.

- Gracias al cielo... ¿Cómo te llamas, hijo?

- Taylor, señora. Me llamo Taylor.

- Genial Taylor... Muchas gracias por responderme al teléfono. De verdad que estaba muy preocupada por Nick. Dile que he llamado y he preguntado por él, ¿vale?

- Eso haré señora.

- Y Taylor... cuida a mi niño.

- Siempre, señora.

Colgué y seguí colocándole los paños sobre su frente como si nada, cuando cuanto más lo pensaba, más irreal me parecía lo que acababa de hacer. ¿En qué cojones estaba pensando?

- ¿Eres consciente de lo que has hecho, Taylor? ¡Te has presentado a mi madre!

- Como tu amigo - matizo.