Año nuevo, curso nuevo.
La escuela Magic Island abre una vez más sus puertas a los nuevos jóvenes con dones excepcionales.
•Esta historia ya está comenzada en nuestro canal de Youtube
•Capitulos largos
•Historia 100% mía
•No se permiten adaptaciones...
[He decidido hacer una maratón con especiales de cada personaje, donde tratara las infancias o vidas antes de llegar a Magic Island. Esto va ayudaros a entender mejor la perspectiva de cada personaje y sus personalidades.]
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
SOOBIN
[7 años]
El niño de cabello negro, se encontraba en la sala con un libro sobre la mesa junto a la mujer que impartía clases.
Ya se cumplía cuatro años, desde que su padre contrató a la señora May, como su tutora privada, a demás de las que le daban en la escuela a la que asistía.
La mujer se convirtió en la figura materna del niño, debido a su trato cariñoso y preocupación por el menor. El pequeño Soobin nunca conoció a su madre y su padre se encargó personalmente de hacer desaparecer todo de ella.
— Una vez más, lo hiciste bien —la profesora May siempre le premiaba con elogios cuando hacía bien los ejercicios — Nuestro Soobinnie es muy inteligente.
Diferente a la reacción que esperaba, el pequeño se giro esperando por otra acción de la mujer, a parte de los halagos. La mujer arrugo su ceño con confusión sin entender lo que el infante quería.
— Premio —soltó Soobin con su mano extendida, esperando por la galleta que solía darle después de los elogios.
— Cierto, casi me olvidaba —contestó sin borrar la sonrisa con un tono divertido, girándose y tomando la caja de galletas de chocolate. — Aquí tienes tu amado premio.
— ¿Sabes algo, Binnie? — habló la mujer observando como el pequeño llevaba la galleta a su boca.
— Mmm — hizo un sonidito con la galleta en su boca, prestando atención a la amable mujer a su lado.
— Mi hijo también adora estas galletas —dijo May agradando su sonrisa al recordar a su pequeño hijo — Tanto como tu lo haces.
— ¿Tienes un hijo? —preguntó con curiosidad el pequeño.
— Tiene un año menos que tú —respondió la mujer — Pero es muy maduro.
— ¿Lo puedo conocer? —preguntó pidiendo permiso para conocerlo.
La mujer siempre quedaba enternecida con el educado niño, Soobin se comportaba como alguien de más edad.
— Me encantaría que lo conocieses —contestó sonriente — Estoy segura de que os llevaríais bien, podríais jugar en la piscina juntos ahora que llega el verano.
— ¿Piscina? —preguntó Soobin con una mueca confundida, el menor no sabía como era una.
— ¿Nunca has ido a una piscina? — el menor negó — ¿Nunca has ido a nadar con amigos?.
