Narrador
La ciudad de Boston hoy es casi un caos. Con cientos de fanáticos en las calles, yendo a la estadio para presenciar el partido de hoy entre el equipo local y el de Los Ángeles. Otros tantos se movilizan a bares o casas de sus amigos para ver el partido juntos.
Es que, luego de semanas en dónde el capitán del equipo de LA, Marco Lawson, no ha parado de tirar indirectas en las redes sobre lo que opina de los demás equipos de la liga, en especial del de Boston, y de su capitán Lincon Hilder. Ha creado caos, y muchas criticas para él, quien no le importa soltar comentarios tan despectivos. Hoy es un partido que no solo Boston quiere ganar, sino un partido que todos esperan que el equipo de Marcos pierda.
Ya en el estadio del equipo, podemos encontrar al equipo de Boston ya en el corredor justo antes de salir al campo. Lincon está tratando de distraerse, de dejar toda la mierda mediática fuera del campo y concentrarse solo en su equipo, y en las estrategias que tienen.
Escucha los gritos de los fanáticos fuera, y trata de que eso lo llene de energía para todo el partido. Es su oportunidad para demostrar porque lo eligieron como capitán, y en el fondo, quiere callarle la boca de una vez por todas a Marco. Es el tercer partido que juega en la temporada, pero la adrenalina y emoción, lo hacen verlo como el primero.
Estira sus dedos sonándolos justo antes de que uno de los asistentes le tienda el casco, dando seña a qué falta poco para iniciar.
—¿Nervioso? — Lincon gruñe antes de posar la vista a Marco pasando a su lado junto a su equipo, este último se detiene frente a él — Descuida. Trataremos de no dañarlos…tanto.
—Que considerado — Murmura sin verle.
—Si, no quiero ensuciar mi imagen con un escándalo — Finge pesar y retoma el paso.
—De eso ya te encargaste tu — Le dice uno de los otros chicos del equipo pero Marco ni se inmuta y continua hacia el campo.
No esperan más y todos terminan por salir al campo. A Lincon le resbala las provocaciones de Marco. Él sabe lo que quiere en ese juego, y será por el y por su equipo, no para probarle nada a nadie. Esa es la diferencia entre el y Marcos.
En el campo, se empiezan a preparar para iniciar el juego. Mientras tanto en las gradas, en una de las zonas de reservados, se encuentran los chicos, quienes estan muy contentos de poder venir a apoyar a uno de sus mejores amigos en este juego tan importante. Al principio no todos vendrían, pero después de todo el revuelo de redes, debían estar para apoyarlo a patearle el trasero al otro equipo.
O eso decía Nick.
Terminan de escuchar los himnos y Maddie ya está a nada de morderse las uñas, nerviosa por como salga el partido, y por Lincon, quien ha estado muy concentrado toda la semana. Todo el asunto de las redes fue un drama, y sabe que tanto el como el equipo decidieron ignorarlo después del segundo día de revuelo. Aunque claro que los reporteros en la entrada del estadio durante los entrenamientos no hacían lo mismo.
A su lado, están Oliv y Drake, metidos en una conversación sobre como hacer algo de espacio en el departamento de Oliv para las cosas de Drake.
—Puedes poner los bolsos en el otro armario — Intenta proponer Drake apoyando el brazo en el respaldo de la silla de Oliv.
Luego de pasar un par de semanas juntos tras el juicio, están intentando hacer mejor las cosas en esta oportunidad, por lo que Drake se quiere establecer un mes en NY junto a Oliv, dado que el alquiler del departamento de ella no expira hasta unos meses más. Luego pensaran en buscar un lugar para ambos en una de las zonas de Manhattan.
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Su Hermano, y Yo #AH&L3
Teen FictionTercer libro de AH&L Es necesario leer los otros dos libros para entender. Han pasado años, desde el momento en el que Olivia tuvo que partir de su natal y soleado Los Ángeles, camino a su nuevo destino: Boston. El tiempo ha pasado, su vida ha cambi...