CAPÍTULO 3 - ''Mal mayor''

1K 38 0
                                    

MÉLANIE DANFORT

Frustrada. Esa era la mejor palabra para describir como me sentía. Estaba con alguien que no amaba ¿Amor? Que era eso?

En este momento, no importaba; lo único que me preocupaba era el temor de que Josh se hiciera daño. Sentía que debía dejar de lado mis propios sentimientos para evitar causarle dolor.

Llevaba con Josh poco más de un mes. Si, solo un mes. Para muchas parejas, eso podría ser nada, pero para mí, era lo más "serio" que había vivido en un tiempo. Sin embargo, en ese transcurso, ya lo había dejado una vez. La razón principal: me di cuenta de que solo lo quería por necesidad, por miedo a estar sola. Sonaba duro, pero era la verdad. 

Lamentablemente, Josh llegó en el momento justo. Así fue como nos convertimos en pareja. Lo sé, probablemente soy la peor persona del mundo, pero no podía evitar sentirme culpable por lo que había hecho. La única razón por la que volví con él fue porque me dijo que pondría en riesgo su vida si lo dejaba.

Estuve días atrapada en mis pensamientos, buscando una salida. La única solución que encontré fue regresar con él. Era un plan horrible, lo sabía. Pero no podía soportar la idea de que alguien sufriera por mi culpa.

***

-  No puedes seguir así – afirma Logan, sacándome de enredo mental

- A qué te refieres? – pregunté, sintiéndome perdida en la conversación

- Sabes que te está manipulando, ¿verdad? - cuestiona, con un tono que dejaba claro su preocupación

"Manipulando" esa palabra resonaba en mi cabeza, no creía que eso fuera posible, es decir nunca me dejaba manipular por nadie

Te recuerdo cuando tu mamá decidía con quién debías salir y a quién debías evitar

Okey conciencia no es el mejor momento para una lección moral.

- Creo que estas exagerando – murmuré, intentando desviar la conversación
- No, Mel. Te está manipulando. - insistió, con un tono irritado que no podía ignorar. Tenía razón. Era mi hermano mayor, siempre preocupado por mi bienestar. Y sí, mi bienestar estaba en juego desde hacía tiempo.

Me bajé del coche, habíamos llegado al asilo. Hoy era el último día del proyecto de este año, la actividad para los ancianitos. 

A pesar de las preocupaciones de mamá sobre si podría equilibrar el grupo y mis estudios, había demostrado que podía con ambos.

Logan y yo nos encontraríamos adentro con Mara, mi mejor amiga, quien también se había unido al proyecto. Nos conocíamos desde los 5 años; era la hermana que siempre quise tener. Mis padres la adoraban, así que no había forma de que nos separaran.

No me pregunten como pasé de hablar con Logan a encontrarme conversando con el fotógrafo del grupo. Era un chico alto, rubio, de delgado, ojos claros color miel y una sonrisa que iluminaba todo a su alrededor.

Puedo rescatar que ahora me agrada entablar conversación con algún extraño, sin sentir escalofríos o miedo.

En todo este tiempo y con todas las actividades previas para recaudar fondos, he conocido a muchas personas así que si o si debía adecuarme al ambiente.

Mara me miraba con una sonrisa en los labios al verme hablando con Vincent, así se llama el fotógrafo

- Pronto tendré mi sesión de fotos gratis? – murmura en voz baja al pasar a nuestro lado, para que solo la escuchara yo

Mis mejillas comenzaron a arder, le lancé una mirada fulminante y solo aumentó su gracia

La actividad salió mucho mejor de lo esperado. La presentación de los niños de un colegio que querían aportar con un espectáculo fue lo más destacado de la tarde.

Más allá del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora