𝓤𝓷𝓸 𝓭𝓮 𝓵𝓸𝓼 𝓭𝓸𝓼 - 𝓨𝓮𝓸𝓼𝓪𝓷𝓰

29 - El mejor hyung de todos

Yeosang POV

Ese día fue el peor de lo que iba del programa de supervivencia. Hacía una semana que estábamos en grabación, no se si el hecho de estar siendo grabado todo el tiempo o que no puedo pensar en otra cosa que no sea el mejorar todo el tiempo pero mi rendimiento estaba yendo fatal.

Las coreografías no llegaba a realizarlas al tiempo marcado, he desafinado algunas veces y me han dado de las puntuaciones más bajas. Mis compañeros trataban de alentarme pero están preocupados por ellos mismos como para preocuparse también por mi.

- ¡Kang Yeosang! - Me llamo la atención el CEO, estábamos en medio de una coreografía y seguía a destiempo - Sígueme.

Miré a mis compañeros, se veían exhaustos. Habíamos practicado esa misma coreografía como 10 veces y seguíamos repitiéndolo una y otra ver porque yo no lograba realizarla como se debía. 

El hombre me indicó el camino a su oficina al final de un pasillo, al entrar noté que no había cámaras ni nada al rededor. El sujeto estaba dándome la espalda - ¿Acaso te parece esto un juego? - Se volteo para verme, tenia el ceño fruncido - Todos tus compañeros están dándolo todo y tú sólo eres una piedra que estorba.

Yo tenía la cabeza gacha y cerré los ojos, aguantando las ganas de llorar.

- Perdóneme - Pedí.

- Estoy decepcionado de ti. Por el único motivo que puedes llegar a hacer algo con tu vida es con tu cara linda pero por lo demás no vale la pena - Escupió sobre el hombro mientras evitaba verme al rostro - Ya lárgate, no quiero verte - Se dio media vuelta con la mano derecha a la altura del hombro, haciéndome señal para que me fuera.

Yo me incliné, aún con los ojos cerrados con fuerza. Me dirigí hacia la puerta.

- Si no veo alguna mejora de tu parte olvida que algún día podrás debutar, sea aquí o en otra empresa - Al terminar de decir eso, me cerró la puerta en la cara.

En ese momento deje soltar todo el aire que estaba conteniendo y, con ello, algunas lágrimas rebeldes que me nublaron la vista. Mis piernas temblaban y no era capaz de volver a la sala de práctica junto a todas las cámaras. Tenía los puños cerrados y un nudo en la garganta, no podía llorar en ese momento, no podía. Me quedé varios minutos tratando de regular mi respiración y calmar los nervios que estaba teniendo.

Tenía razón. Estaba siendo un estorbo para mis compañeros, no podía permitir ser un obstáculo que impida que los demás debuten por hacerse cargo de mis errores. Tal vez aún estaba a tiempo de dejar este sueño inalcanzable y volver con mi madre. Rendirse parecía ser una buena opción para mí. 

Estaba tan absorto en mis pensamientos que no me percaté de que alguien se acercaba a mi y con un abrazo cálido me atrapó. Al principio no sabia de quien se trataba pero apenas pude oler su perfume pude relajarme y dejar que me sostenga, extrañamente el pecho de Seonghwa se sentía cálido.

- Eres increíble - Dijo aún abrazándome, yo no quise verle al rostro y seguí con mi cara en su pecho - Siempre admiré tu forma de esforzarte y dar lo mejor de ti en todo momento.

- Lo dices porque eres mi amigo - Dije en un hilo de voz.

- Lo digo porque te conozco y te he visto crecer todo este tiempo. Es verdad que estás pasando por mucho en estos días y es normal que eso te afecte en el rendimiento pero eso no les da el derecho de hablarte de esa manera.

- ¿Escuchaste? - Pero no me contestó, siguió con su discurso.

- Eres más que una carita linda. Tienes una voz profunda pero dulce a la vez, cuando te dejas llevar por la música puedes hacer que los demás entremos en un transe viéndote y ni hablar de la presencia escénica que tienes. Hay veces que me siento intimidado por la forma que miras a la cámara - Tomo mis hombros para alejarme y poder ver mi rostro. Al ver que mis lágrimas seguían cayendo me limpió con sus pulgares mientras me miraba con una sonrisa dulce - Eres increíble y talentoso, yo tengo fe en que lograrás lo que te propongas. Así que no hagas caso a lo que CEO diga - Se acercó a mi y susurró - Es un hombre viejo ya - Lo cual hizo que mis comisuras se elevaran por un momento. 

Estar entre los brazos de Seonghwa era reconfortante, creo que si él no hubiera venido a consolarme me hubiera rendido inmediatamente. 

Nos quedamos abrazados hasta que pude calmarme y me recompuse. 

- ¿Ya estás mejor? - me preguntó desde un lado mío, habíamos ido a buscar su bolso donde tenía una botella de agua de la cual yo estaba tomando en ese preciso momento. 

- Sí, muchas gracias - Dije mostrando una pequeña sonrisa - Creo que si no hubieras aparecido ya me hubiera rendido. Gracias. 

-No me agradezcas, no hice la gran cosa tampoco - Sonrió - Ahora vamos - Me extendió su mano la cual mire con confusión. 

- ¿A donde? 

- A practicar juntos, no dejaré que te rindas tan fácil - Como yo no le tome la mano entonces él la tomó y me llevó junto a si - Mañana tenemos la presentación a los jueces y van a ver al verdadero Yeosang. Sé que te sabes la coreo, te he visto, sólo debes concentrarte asi que iremos juntos al mismo ritmo. 

Ese día me quedé hasta tarde practicando con Seonghwa, me ayudó bastante y fue de gran apoyo. Me marcó los errores y me explicó con paciencia. Ahora estaba más seguro de la presentación de mañana, iba a dar lo mejor de mí y todo gracias al apoyo del mejor hyung de todos.