𝐓𝟏: 𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟓

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Lan WangJi se encontraba en el cuarto semestre de la carrera de Composición Musical. Su curso de 'Análisis IV' había acabado y ahora se dirigía a 'Wēn pópo de kāfēi diàn'. La cafetería no quedaba lejos al edificio de música; sin embargo, no era parte de su ruta diaria pasar por ahí, pues el edificio contaba con su propio estacionamiento en la parte trasera, por lo que eran raras la veces en que pasaba por los alrededores de la cafetería.

Ayer, martes, no fue necesario que apareciera en el estacionamiento, ya que Wei WuXian no trabaja; así que, cuando termino sus clases, se dirigió a la casa de los Jin para la tutoría de Jin XuanYu. Las horas de tutoría pasaron tranquilas y sin incomodidad alguna, no sabe lo que hizo Jin ZiXuan, pero se lo agradecía.

Ahora le tocaba a él seguir con su parte del trato.

Según el horario, los miércoles las horas laborales del Wei se dividían en dos: por la mañana y por la noche. Sinceramente no pensó que esa cafetería habrá tan temprano y cierre tan tarde; supuso que eso le generaba ganancias, pues se ajustaban al horario de muchos universitarios.

Lan WangJi optó por ir al horario matutino pues, desde muy joven, estaba acostumbrado a levantarse a las cinco de la mañana, así que no le afectaba en nada; por el contrario, si hubiera elegido ir en la noche sí iba hacer algo pesado, ya el mayormente duerme a las nueve —si la situación lo amerita a las diez—.

Al entrar a la cafetería sus ojos se encontraron con los de Wei WuXian.

  —Oh... —murmuró Wei WuXian al ver al cliente guapo del otro día otra vez por ahí. Normalmente su memoria era pésima con las personas, pero era imposible olvidar un rostro así. Sus labios, que se habían formado en una pequeña 'o', se extendieron en una sonrisa genuina—. ¡Bienvenido! —soltó un poco fuerte, de alguna manera se sentía más energético.

Lan WangJi se tensó por lo ruidoso que era ese chico... No fue por su sonrisa, claro que no.

Con pasos algo rígidos se acercó a la barra de pedidos.

  —Buenas días.

  —Buenas días —le devolvió divertido el saludo, ese chico era muy serio para alguien de su edad. A Wei WuXian le generaba unas ganas de molestarlo, pero se contuvo—. Regresó. Veo que le gusto mi servicio —dijo de manera sugerente convirtiendo su sonrisa en una picara.

Bien, fallo en contenerse.

Lan WangJi trató de disimular su expresión escandalizada. ¿¡Acaso ese chico trato de insinuar lo cree que estaba insinuando!? 

«¿¡Con qué clase de desvergonzado quieres involucrarte, Jin ZiXuan!?», pensó escandalizado.

  —¿Cómo? —Logró preguntar.

  —Que si le gustó el servicio que ofrecemos en 'Wēn pópo de kāfēi diàn'. —Le brindó una sonrisa angelical. Luego cambio su expresión a una confundida mientras inclinaba hacia un lado su cabeza y, con una voz que entonaba inocencia, preguntó—: ¿Por qué? ¿Qué fue lo que entendió?

Lan WangJi achicó un poco los ojos, como si examinara las intenciones contrarias, después de unos segundos viendo como el otro mantenía esa expresión pura e ingenua lo dejo pasar.

  —Nada. —Fue lo único que dijo.

  —Entonces, ¿qué es lo que ordenará?

Levanto la mirada hacia el tablero tras el joven y dirigió su mirada a la sección de desayunos, luego de analizarlo pidió un smoothies tropical y unas tostadas con palta, queso crema y tomate, había pensado en ordenar solo algo para beber, pero al recordar que no tomó desayuno aprovecho que ya estaba ahí. Después de pagar se sentó en una de las mesas de la fila derecha, donde estaba el sillón largo, a esperar su orden.

¿Cómo ayudar a mi amigo a conquistar a su crush sin fallar en el proceso?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora