𝐇𝐢𝐭𝐬 𝐃𝐢𝐟𝐟𝐞𝐫𝐞𝐧𝐭 | 𝐒𝐡𝐞𝐫𝐥𝐨𝐜𝐤 𝐇𝐨𝐥𝐦𝐞𝐬 [ᵉⁿᵒˡᵃ ʰᵒˡᵐᵉˢ]

𝓿𝓲𝓲𝓲. maybe the world needs to change

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chapter 8

❝ Maybe The World Needs To Change ❞

Después de las duras palabras de Edith en su cafetería, Lidia y Sherlock no volvieron a sacar el tema. En realidad, Lidia aprovechó el momento de Sherlock para ir a la parte de arriba a investigar el lugar. Descubrió que los extraños ruidos eran a causa de mujeres que tomaban clases de karate, algo admirable realmente. Nadie la cuestionó cuando ingresó a la oficina que sospechaba, era de Edith. Examinó el lugar en busca de algo que pudiera servirles, y encontró una caja llena de dinamita con un logo extraño en la tapa; Limehouse Lane.

Ese fue el siguiente destino de la pareja, llegando a las afueras de la civilización, en donde se encontraban los muelles y embarcaciones.

Lidia y Sherlock caminaban en silencio por las fabricas de explosivos, la mujer sintiendo la repulsiva mirada de los pervertidos trabajadores.

Aunque algo invadió la mente de la de ojos azules, la cual no paraba de mirar de reojo a Sherlock en cada oportunidad que podía, analizando sus movimientos atentamente.

—¿Te quieres casar? — soltó de golpe mirándolo, sin dejar de caminar.

Sherlock la miró como si le hubiera salido un tercer ojo, aunque la idea no le disgustó para nada.

Lidia cerró sus ojos avergonzada. —No estaba... no fue. No fue una propuesta— explicó. —Es solo que... Edith dijo que no tienes esposa o amigos. Estoy segura que conoces a muchas personas, pero ¿a tu futura esposa?— negó con asco imaginando un mundo en el que Sherlock estuviera comprometido.

Suspiró. —No creo que pueda manejar algo serio por ahora— se sinceró con ella.

—Sherlock Holmes, quien diría que eres un mujeriego— sintió su corazón doler.

Sherlock rió, sacudiendo la cabeza.—No lo soy. Solo... estoy en un punto en el que no quiero lastimar a nadie por intentar cumplir con las expectativas de los demás. La gente me conoce por ser solitario, estoy dando un gran paso al estar contigo ahora.