12.

112 13 12
                                    

[Narrador]

Peter se había quedado estático, helado, no tenía palabras y estaba tan asustado de la persona que estaba en la puerta, se preguntaba quien demonios era ese hombre al cual le había dado su confianza y su corazón tan rápido.
Ahora tenía sentido que todo sucedería así de espontáneo, así de fácil.

—Hey, no, no. Peter, por favor déjame explicarte, estoy seguro que estás muy asustado y muy desorientado pero por favor déjame que te explique todo, ¿Sí?

Peter se levantó rápidamente sin responderle nada e intentó lanzarlo de la puerta para salir corriendo del lugar, sin embargo Tony no lo permitió.
Se quedó allí en la entrada varado, lo tomó entre sus brazos evitando que el chico saliera del lugar puesto que si lo hacía podría cometer una locura. Tenía que explicarle todo.

—¡Sueltame, por favor, quiero irme de aquí, por favor yo no le he hecho nada malo, solo déjeme ir por favor!

—No, no, mi niño, por favor, no pienses que voy a lastimarte, te iba a contar pero... Se me salió de las manos.

—Usted no está bien, usted necesita ayuda, por favor suelteme, déjeme ir de aquí por favor, se lo suplico.

Tony se sintió tan mal por los lamentos de Peter, él realmente pensaba que lo lastimaría.
Sin tan solo supiera que desde que nació él lo estuvo cuidado tras bambalinas.

—Bien, mírame —Tony lo soltó, y buscó su mirada. —Solamente déjame darte algo y puedes irte. Luego si quieres regresar para una explicación estaré aquí, sí.

Tony salió del baño y Peter lo siguió con muchísimo miedo. No sabía lo que el hombre podría hacerle.
Lo siguió a una distancia prudente por si algo salía mal. Tony se dirigió hasta su escritorio, sacó la llave de su bolsillo y sacó las hojas que Peter tanto había querido leer.

—Ten, por favor no las tires, lee todo, no te voy a detener si te quieres ir después y aquí estaré si quieres una explicación mejor.

Tony le entregó las hojas al chico este las tomó y salió de la casa a toda velocidad, ni siquiera cerró la puerta detrás de él.

Solamente salió y se perdió en la calle.

Tony suspiró pesadamente, nunca pensó que eso iba a suceder así, tan pronto, pero quizá así debía ser. Ya no quedaba en sus manos, después de tanto tiempo era Peter quien tenía el destino en sus manos. Cerró la puerta y se dirigió a por un poco de whisky.

————

Una vez que llegó a su lugar seguro, aunque en ese momento no recordaba que Tony ya sabía de ese sitio, se permitió desacelerar y respirar rápidamente.
Se sentó en el pasto mientras su caja torácica retumbaba, seguía nervioso, una parte de él sentía que en cualquier momento lo vería llegar por allí para hacerle algo malo.
Pero no había manera que no lo viera a esa distancia, la cual era considerable como para volver a correr y que no lo alcanzara.

Miró las hojas en sus manos las cuales apretó tan fuerte para que no se le cayeran que estaban un poco apretujadas.

Empezó a leer esperando una respuesta lógica para todo eso.

"Él está de vuelta, después de tantos años, años que parecieron siglos de desesperación.
Está otra vez aquí, lo ví nuevamente y esto que suelen llamar corazón vibró en mi pecho, festejando qué él está otra vez aquí, cerca de mí.
Lo esperé, lo miré cuando a penas había vuelto a nacer, y los años parecían ir tan lentos, pero ahora al fin, después de tantos años y pensamientos que parecen tontos cuando los gestiono por segunda vez, podría besarlo..."

Falling. (STARKER)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora