8

79 5 0
                                    



JunHui

Abrí mis ojos lentamente y la luz de la mañana hizo que los cerrara de nuevo, era extraño no sentir el olor a incienso del cuarto donde siempre dormía, este cuarto olía a un té que conocía bastante.
Calor, ya sentía eso desde que estuve más consciente de en donde me encontraba y en qué situación. El príncipe descansaba a un lado mío plácidamente, me senté en la cama para mirarlo, tenía un rostro calmado y su brazo al rededor de mi cintura.

Volví a cerrar los ojos, escuchando el sonido de las aves que habían cerca del lugar, todo era tan tranquilo, quisiera que siempre fuera así. Mi pequeño momento de tranquilidad terminó al oír como alguien llamaba a la puerta del cuarto y con desespero me levanté, despertando rápidamente al príncipe, estaba más atento de lo que pensé.

-No me digas que...- empezó y lo miré aterrorizado.
-Las concubinas de su madre- hablé con ojos abiertos -Mierda- maldije -Príncipe levántese ¿dónde puedo esconderme?- pregunté mientras me movía lentamente por el lugar y las voces al otro lado se escuchaban más insistentes.
-No puedes salir por allí- apuntó a la puerta corrediza que llevaba al patio del costado del palacio, estaba cerrada con llave -Mi madre no me ha dado la llave hace bastante- se levantó y barrió el lugar con su mirada rápidamente -El armario, sacaré la ropa de hoy y métete allí-

Tan solo minutos después de que entrara a mi escondite escuché a las concubinas entrar al lugar, ordenaron todo y luego detrás de unas cortinas apareció el príncipe con su ropa ya cambiada. Hablaba con ellas mientras lo arregablan, las trataba muy bien, sonreía y reía muy bonito.

Le pusieron muchos accesorios por el cabello que lo dejaron tan impecable. El momento de pánico que tenía acabó cuando quedamos solos, salí del armario viendo como MingHao se aseguraba si ya se habían alejado de donde estábamos.

Giró y caminó hasta donde estaba, de seguro mi aspecto era el peor, su sonrisa tan sólo mostraba lo satisfecho que estaba al tenerme en su cuarto, pasó sus brazos a mis costados hasta que los llevó detrás mío, mis ojos se abrieron de par en par al sentir sus manos acunando mi trasero y soltó una risa burlona, intentar separarme de él era inútil pero lo seguía haciendo, sus manos seguían en ese lugar y tenía sus ojos sobre mí mirándome intenso.

-¿Te molesta que lo haga?- preguntó aún con su sonrisa pícara.
-Cla‐claro- dije con la cara ardiente, mis manos en su pecho dejaban en claro que quería tener una distancia prudente de él -Deje... deje de hacerlo- tragué saliva y dejé de sentir sus manos. Me separé rápidamente al sentirme libre de él y soltó una carcajada, sólo lo miré enojado.
-A mí no me molestaría en absoluto que lo hicieras conmigo- de nuevo se acerca hasta donde estaba parado y esta vez tan rápido como pudo me sostuvo de las piernas e inconscientemente llevé mis manos hasta su cuello agarrandolo fuerte, tenía miedo de caer -¿Quieres besarme?- preguntó con la ceja arqueada, negué rápidamente mientras cerraba mis ojos.

Sus labios estaban sobre los míos de nuevo, como siempre lo hacía, estaba en un punto que no sabía si ya no me molestaba que lo haga o si aún lo estaba, desde que llegué estaba más confundido que antes y todo lo que iba pasando para el príncipe estaba más que claro que de mí a partir de ahora podría obtener cualquier cosa que quisiera.

-Hoy tengo clase de pintura con Soonyoung ¿me acompañaras?- después de un breve silencio volvió a hablar y como respuesta a su pregunta sólo asentí.

Tenía la costumbre de siempre preguntar si lo acompañaría en donde iba y como consejero debía hacerlo a cualquier lugar que iba, parecía que a veces lo llegaba a olvidar y me trataba como si no fuera su consejero.

❖ ◦ ❁ ◦ ❖

Soonyoung nos recibió amablemente, siempre con la sonrisa que lo caracteriza, esa mañana iban a emplear una nueva técnica para intentar cambiar las que siempre hacían.

El príncipe le había dicho que eran muy aburridas y no quería repetir lo mismo cada vez que venía, por eso la razón del cambio en este día.




🌷
Me tardé, perdón.
Se me olvidó últimamente porque tengo muchas cosas en la cabeza.
Si vieron lo que está pasando con Dokyeom por favor no duden en participar en lo que se está haciendo♡

PríncipeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora