IMPERFECT LOVE | Soonhoon #2

Capítulo 5

—¿No crees que deberíamos hacer algo?— La expresión del rostro de Wonwoo era sombría. Sus pijamas de seda, color rosa palido, brillaban en la pantalla, captando toda la atención de Soonyoung.

—No lo sé,— Soonyoung se mordió el labio inferior, mirando con atención la pequeña planta que estaba a un lado de su laptop; la había regado dos veces ya, y dudaba de si debía de regarla una tercera vez. —Estoy preocupado.

—Yo tambien.— Wonwoo confesó. La madre de Wonwoo había ingresado a su habitación, recordándole que tenía que sacar la basura y saludando a Soonyoung en el proceso. —¿Le contaste a Mingyu?

—No.— Soonyoung negó con la cabeza, suspirando profundamente en un intento de que algo de la tensión de su cuerpo se esfume de esa forma. —Sólo te dije a ti, Joshua no estaba en casa cuando llegué, creo que se iba a ir a la casa de un compañero de su clase para terminar un proyecto grupal.— Soonyoung regreso a sentarse frente a la pantalla con un vaso de agua en su mano. —¿Tendría que decirle a Seungcheol y Jeonghan?

—Yo creo que si.— Wonwoo le respondió, su barbilla estaba descansando arriba de su rodilla mientras buscaba algo en su computadora. Su expresión era tan sería que temia hablar y desconcentrarlo. —No hay nada en internet.

—¿Qué buscaste?

—Lee Jihoon.— Wonwoo respondió. —Encontré su Instagram, pero no hay ninguna noticia de él. Supongo que eso es bueno. ¡Oh! También encontré su cuenta vieja de Facebook, pero parece que no la usa hace siglos, su foto de perfil es de cuando era un niño.

—¿Tu crees?— Soonyoung preguntó, haciendo caso omiso a las redes sociales de Jihoon.

—Si. Porque si hubiera ocurrido algo trágico seguro habría al menos un artículo al respecto.— Wonwoo se dispuso a beber agua desde una botella que tenía escrito come libros Won y muchos stickers de gatos y cafés.

—Tienes razón.— Soonyoung asintió, tocando el cactus que había traído de la casa de Jihoon, dejando escapar un pequeño alarido cuando una espina le pincho el dedo. Wonwoo no le presto atención a la grosería que Soonyoung dijo, pero se rio de su amigo cuando se llevó el dedo sangrado a la boca. —¿Me pasas su Instagram?

Wonwoo levantó una ceja, pero su teléfono sono informando que había recibido un mensaje nuevo.

—Sólo quiero investigar su perfil, puede que haya alguna pista allí.— Soonyoung se defendió.

—Seguro.— Wonwoo respondió sarcásticamente poniendo los ojos en blanco.

—¿No crees que puedo encontrar algo?

—Puede ser.

—Esa botella es horrible, ¿lo sabes?— Soonyoung le comentó intentando desviar la conversación. —Deberías decirle a Mingyu que necesita un mejor gusto para sus regalos.

—Al menos él me da regalos.

Soonyoung puso los ojos en blanco. —Sabes que ahora estoy pasando por un momento difícil económicamente.

—Por supuesto. Tan malo que te compraste una almohada de casi cincuenta dólares solo porque tenía un tigre.

—¿Cuántas veces es aceptable regar un cactus?

—Creo que era medio vaso por semana o semana por medio.— Wonwoo había tenido una obsesión por los cactus cuando tenían alrededor de doce años y no fue hasta adentrada su adolescencia que está obsesión se fue calmando. Soonyoung recordaba como era tener que caminar con cuidado en la habitación de su amigo porque estos estaban esparcidos en todas partes. —No sabía que ahora querías cuidar cactus, me hubieras dicho y te regalaba alguno.