Narra Chiara
Me encontraba sentada en el sofá de color gris con Martin al lado. Nos habíamos encontrado con Naiara y con Denna mientras íbamos hacia un restaurante, nos habían invitado a comer a su casa y aquí estábamos.
Nada más entrar se escuchó un ruido muy fuerte y las chicas salieron corriendo hacia una de las puertas, dejándonos a Martin y a mí sentados en el sofá. Mis ojos se movían libremente por la estancia. Las paredes eran de color blanco, haciendo así que resaltasen los colores del sofá y del mueble de madera en el que se encontraba la televisión.
En ese mismo mueble se podían observar unas cuantas fotos pero que desde la distancia a la que yo estaba no podía distinguir ninguna cara. La luz entraba a través de las cortinas que tapaban la puerta hacia un balcón, donde había una pequeña mesa y dos sillas de plástico.
-Bueno chicos -dijo Denna sentándose en el sofá con nosotros- perdón por dejaros aquí pero...
-¿Qué ha sido el golpe? -preguntó Martin.
-Nada -dijo Naiara de pie en medio del salón- a veces, Violeta se cree que está en su gira mundial como Beyoncé y se marca unos bailes en la ducha que ojito...
-Naiara, nadie tiene por qué enterarse de eso -Dijo Violeta entrando al salón.
Llevaba un pantalón de chándal negro y una camiseta básica blanca con letras verdes. Su mojado cabello dejaba que las gotas rebeldes cayesen por sus hombros. Tenía unas ojeras levemente marcadas y en la ceja derecha tenía una herida, la cual sangraba.
Violeta, ante un gesto de Denna, miró hacia nosotros y nuestros ojos se encontraron, poco a poco una sonrisa de medio lado, por su parte, quiso aparecer en su rostro.
-Venga Vio -dijo Naiara- ven a la cocina que te termino de curar la herida.
Violeta solamente asintió y siguió a la más mayor hasta la cocina. Martin, Denna y yo, nos quedamos en el salón, hablando sobre la idea que tuvo Martin, para alguna noche en la cafetería de Denna.
Mientras estos dos conversaban, yo me levanté y fui a la cocina, encontrándome allí a Naiara sentada en la encimera, mientras Violeta se quejaba del poco tacto que tenía la mayor para curarle la herida.
Los quejidos de Violeta, mezclados con los regaños y las risas de Naiara, me hicieron reír, llamando así la atención de las dos.
-Díselo tú Chiara -dijo Naiara riendo- di que es una niña pequeña.
-Una niña pequeña no -empecé a decir- es una floja.
- ¡Oye! -dijo Violeta- gracias por preocuparos, estoy bien ¿eh? -dijo con ironía- Para que tener enemigos si tengo este tipo de amigas.
-Anda quejica -dijo Naiara terminando de ponerle unos puntos de aproximación- ya estás curada, me voy a cotillear sobre ti con estos, chao -dijo mientras salía de la cocina, dejándonos a Violeta y a mí solas.
-¿Te duele mucho? -dije mientras me acercaba a ella.
- Me duele bastante sí -dijo con cara de pena, mientras se acercaba más a mí- pero que una chica tan guapa, como tú, se esté preocupando por mí, lo hace todo más interesante.
- ¿Interesante? - me pegó a ella y mi mirada fue directa hacia sus labios, mi respiración se estaba volviendo pesada y mi corazón latía con fuerza.
- Si, esto es típico de escena de película romántica -dijo susurrando encima de mis labios- ahora vendría un beso. -rozó nuestros labios y yo quería morir.
No tenía el control sobre mi cuerpo y me estaba dejando hacer, ¿me iba a besar con violeta? pues mira, si el destino quiere yo no me voy a oponer. El sonido del timbre nos interrumpió y volví en mí, ¿qué estaba haciendo? ella tenía novia y yo no me iba a meter ahí.
- Esto podría pasar en otro momento donde no estés en pareja - la miré directamente a los ojos, y volví al salón.
Entré en el salón y me senté al lado de Naiara, ya que Denna se había levantado para ir a abrir la puerta. La rubia entró al salón con tres cajas de pizzas, que dejó en la pequeña mesita del medio del salón. Violeta salió de la cocina con una botella de Coca-cola y otra de Fanta de naranja cogidas por la parte del tapón, Naiara al ver a Violeta con las botellas, se levantó y fue directa a la cocina a coger un vaso para cada uno.
La pelirroja se sentó en el lugar donde anteriormente estaba Naiara, es decir a mi lado. Evité mirarla, en el fondo tenía muchas ganas de besarla pero tío, tenía novia, yo no me voy a meter en el medio de una relación, sé lo que es estar al otro lado y no quiero que nadie sufra así.
Las pizzas estaban calientes y con el día que hacía hoy se agradecía el calor, fuera azotaba una ola de frío que no vimos venir y se metía hasta los huesos. A medida que las pizzas se terminaban la conversación cambiaba, sin embargo, Violeta no había levantado la mirada de su móvil.
- Bueno - dijo Martin mirando a Denna - ahora que hace este tiempo tan malo, ¿por qué no organizas un certamen de poesía?
- Oh ¡me encanta la idea! -dije emocionada- no hay nada mejor que compartir tus pensamientos más intensos acompañados con un buen café caliente.
- Me parece muy buena idea -dijo Denna- me gustaría ver que es lo que escribes, bohemio -dijo mirando a mi amigo.
- Tienes pinta de ser muy profundo -dijo Naiara.
- Yo no soy el que mejor escribe, aquí mi amiga -dijo señalándome- compone canciones preciosas, y no te creas que tarda meses en hacerlo eh, en una tarde te hace 7.
La conversación empezó a girar sobre mi persona y no era algo que realmente me gustase. Odiaba ser el centro de atención, no me gusta tener tantos ojos observándome, me pone nerviosa. Por esta razón agradecí que Violeta rompiera el silencio dándome un pequeño apretón en el hombro.
- Oye chicos, ¿os apetece quedaros a ver una peli?
- Ay si -Dijo Naiara- vamos a ver algo, compartamos tiempo juntos.
Empezaron a mirar la cartelera de Netflix pero mi cabeza estaba pensando en otras cosas, por ejemplo: Violeta. Desde ese casi beso no puedo dejar de pensar en como se sentiría la novia si se enterase, por qué Violeta lo había hecho o cómo hubiese reaccionado realmente.
Salí de mis pensamientos cuando vi la película que habían elegido, Call me by your name aparecía lentamente en la pantalla, mi vista no se quería apartar de allí. Mi móvil vibró y miré la pequeña pantalla encendida.
@lanefervivi
Chiara, ¿qué opinas de las relaciones abiertas?

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Una ronda de más // Kivi
Fanfic-Estás enamorada de ella -dijo acercándose a mí. -No Ruslana, es una clienta habitual y ya. -No te lo crees ni tú, Chiara -volvió a decir. -Oye guapa -dijo una voz muy conocida, que provenía de la pelirroja que nunca dejaba de mirar- Pon otra ronda...