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Nota de la autora: Al fin actualicé, que sorpresa! De todas formas, he dejado esta canción para un momento en específico de la historia. Cuando se mencione que Killua ha colocado música en su playlist será el momento. Es muy crucial para la historia. ¡Disfruten! ^^

Gon no sabía que sucedía consigo mismo, la situación lo enloquecía

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Gon no sabía que sucedía consigo mismo, la situación lo enloquecía. Cada día de su vida su trabajo fue perfecto, su corazón duro y su mano diligente para atrapar a los malos. Su visión entre el bien y el mal estaba tan dividida como la clara diferencia entre izquierda y derecha.

Pero algo molestaba en su interior, su cuerpo parecía tener algún tipo de accionar predeterminado frente al ASESINO, no está de más recordar que es un criminal, Killua. Gon tenía que admitir que este reto esta vez podría estar fuera de su alcance, el joven era tan increíblemente capaz de hacer que su guardia caiga en picada y unos sentimientos que jamás había sentido afloren de alguna parte de su corazón. Pero no eran nuevos, no, eran más viejos de lo que podía recordar.

Es inestable y Killua parece no hacer nada en su contra, lo detesta, lo odia, lo desprecia con todo su ser! Gon odia a todo tipo de criminal, pero el que ahora tiene frente a él sonriéndole con calidez hace que su mente piense cosas tan estúpidas como "se ve muy lindo".

Lo odia.

—¡Tierra a Fruck, tierra a Fruck!— un par de dedos chasquean frente a él y después de un rato al fin parecen llamar su atención.

Ah, era su amigo, Leorio.

Su amigo de la infancia (no es lo que recuerda, pero confía en que así es) y uno de sus dos únicos amigos, ambos agentes del FBI.

—¡Leorio! ¿Qué te trae por aquí?— saluda con sincera sorpresa, sus amigos rara vez solían ir a su organización a verlo.

Leorio lleva un traje azul marino como siempre, afirma que es su identificación, Blue Shadow, afirmaba que era un nombre genial. Gon no era nadie para afirmar lo contrario cuando él sabía lo estúpido que llegaba a sonar su sobrenombre.

Recuerda la primera vez que llegó a su primera organización, a penas con 19 años y su mirada brillante pidiendo unirse a las filas del FBI como un agente. Después de una dura evaluación finalmente fue aceptado y su nombre fue solicitado. Antes de pensarlo dos veces, su voz ya había sonado con la entonación de Fruck. El veterano que lo había evaluado solamente soltó una risa, pero no dijo más al respecto y finalmente lo registró de esa forma.

—Me ha contado un pajarito, que has tomado el caso Killer cat— Gon asintió en respuesta y Leorio suspiró, para luego golpear con su índice la frente del chico —¡¿A caso ya no deseas vivir?! Todo ser con dos dedos de razón, sabe que ese caso aún no está al nivel de nuestra generación, incluso Kurapika podría no ser capaz de conseguirlo— gruñó, trayendo a colación a su otro amigo, el rubio loco de las arañas. Gon sabía que era poderoso y sin duda Killua tendría que cuidar sus pasos si estuviera estuviera bajo su mira; lástima que el detective de las cadenas no tuviera más ojos que para su araña desde hace ya tiempo.

𝗔 𝗠𝗔𝗧𝗧𝗘𝗥 𝗢𝗙 𝗣𝗘𝗥𝗦𝗣𝗘𝗖𝗧𝗜𝗩𝗘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora