🔳 潘多拉之谜 ~ Penguins: El Misterio De Pandora [2° Parte]

Una Misión De Rescate O Un Suicidio

Timo miraba con horror los restos humanos que estaban en el cuarto de vidrio de al lado. El hombre corpulento que se comió a los padres de Timo había sido encadenado y gruñó al no poder salir y comerse al chico que aún lo observaba con los ojos llorosos.

—Timo —habló Francis, quien al igual que Timo y Gabriel, observó cómo el hombre comió a las dos personas—. Te dije que te mantengas alejado de los asuntos de Pandora.

—Todo el tiempo creí que mis padres me habían abandonado —murmuró Timo.

—Tus padres fueron un fracaso en el proyecto. Íbamos a darles una inyección para que su muerte sea rápida y sin dolor, pero tu intento por liberarlos hizo enojar al doctor Espiráculo.

Francis vio a su padre presionar un botón, inmediatamente un gas morado llenó el cuarto del hombre encadenado, él rápidamente cayó hacia un lado teniendo dificultades para respirar hasta que dejó de moverse, manteniendo los ojos abiertos.

—Aquí nos encargamos de mejorar al hombre, perfeccionarlo —habló Gabriel, quien se hacía llamar "doctor Espiráculo"—. 1BT2 apenas decía algunas palabras después de los experimentos, ya no razonaba, era como un animal salvaje —dijo con decepción, refiriéndose al hombre que acababa de matar con el gas venenoso.

—No puedo creer que estés de acuerdo con ese demente —Timo le dijo a Francis.

Francis lo miró sin mostrar alguna expresión desde que llegó. Él hacía lo posible por ocultar cómo se sentía, quería huir y olvidar lo que vio hace unos minutos, había visto al hombre con colmillos morder y descuartizar a dos personas, las escuchó gritar y vio su sangre salpicar al vidrio frente a él. Se sintió mareado al ver la grotesca escena, por un momento creyó que se desmayaría, pero tenía que disimular frente a su padre si no quería arriesgarse a ser uno de sus monstruos.

—Son unos sacrificios por el bien de la ciencia —se encogió de hombros y sonrió levemente—. Por cierto, ¿Ves esa cápsula que está atrás tuyo?

Timo miró hacia atrás y vio que contenía algo negro.

—¿Qué es eso?

—Algo que no es de este mundo, los llamamos simbiontes.

Francis presionó un botón, abriendo la cápsula, la criatura empezó a deslizarse por el piso, acercándose hacia Timo.

—¡AH! ¡No!

Timo corrió hacia el otro extremo del cuarto y golpeó el vidrio desesperadamente. Francis mantuvo la misma expresión, ignorando los gritos del chico.

—¡Debemos rescatar a Skipper! —Johnson alzó la voz golpeando la mesa con las manos, hace días que su líder había sido secuestrado y los demás no dejaban de hablar sobre una pirómana.

—También queremos salvar a Skipper, pero esto no puede esperar —habló Kowalski—. ¿No lo entiendes? Ella ya quemó las casas de nuestros amigos.