🔳 潘多拉之谜 ~ Penguins: El Misterio De Pandora [2° Parte]

Envueltos En Un Gran Lío

En uno de los salones de la escuela Holmes, los niños de preescolar observaban con atención el show de títeres.

—... Aprendí de mis errores y no volveré a mentirle a mis amigos —habló Skipper agachado dentro de la caja, moviendo el títere verde—. Me disculparé con Oscar-...

—Pero no te perdono —interrumpió Julien, arrodillado al lado del pelinegro, moviendo el títere anaranjado—. Porque sé que no debo perdonar al tonto de Kyle, porque yo el guapetón de Oscar no seré amigo de un traidor.

—¡Cola Anillada! Digo... Oscar—Skipper lo miró serio ~ ¿Qué estás haciendo? ~ le susurró, Julien cambió lo que habían ensayado—. Sé que no debí mentirte, realmente estoy arrepentido de haberlo hecho. Pero no soy un traidor.

—¿Y cómo se le dice a alguien que deja que unas ardillas me tiren a la basura?

—¿En serio te parece un buen momento para hablar de eso?

—Eres un mentiroso que abandona a sus amigos cuando más lo necesitan —dijo Julien enojado, recordando cuando Skipper se fue poco después de que fueran amenazados de muerte.

—Y tú eres un egoísta que molesta a todos. Hasta tu mejor amigo ha querido estar lejos de ti.

Julien intentó golpear a Skipper, pero éste lo esquivó y le dio una bofetada, Julien le golpeó en la nariz y saltó hacia él haciendo que ambos cayeran al suelo y salieran de la caja, los dos rodaron por el salón sin dejar de pelear.

—¡Pelea, pelea! —gritaban animadamente los niños pequeños.

—¡Skipper, Julien! —se oyó una voz femenina.

Skipper, quien estaba encima de Julien y alzaba el puño a punto de golpear al malgache, se detuvo y levantó la mirada, encontrándose con la expresión enojada de la maestra.

—Vayan a la dirección.

Skipper y Julien se pusieron de pie y fueron donde se les indicó, el director los observó desde su escritorio.

—Otra pelea... ¿Qué es lo que les pasa? Les he dejado varias actividades como castigo y ya están muy atrasados en sus clases por sus constantes peleas —suspiró con resignación, se estaba cansando de ver a esos chicos en su oficina—. Ya hablé con los maestros, a partir de mañana se sentarán adelante en todas las clases, uno al lado del otro y todas las tareas que tengan lo harán juntos.

—Me esforzaré en las actividades que me digan, haré lo que me pidan... —habló Julien—. Pero po' favor, no me pongan con esta ave de agua apestosa —señaló hacia Skipper.

—¿Ave de agua apestosa? —repitió el director confundido.

—Puedo hacer todas las tareas yo solo, le agradecería que no me obligue a hacerlas con ese cerebro de gorrión —señaló hacia Julien.