El sonido de la puerta llamó la atención de Aquino, quien se levantó con pesadez para abrir.
— ¡Duxo abre ya! — los golpes a la puerta aumentaron — ¡Tienes que estudiar tu discurso! —
Cuando la puerta finalmente se abrió, revelando a un chico alto que el castaño reconoció como el vicepresidente de Fowlhigh, Duxo estaba justamente saliendo del baño, vistiendo un conjunto playero que poseía un diseño similar a los pantalones de Patricio Estrella, ambos chicos se contuvieron de reírse por lo bobo que lucía.
— ¿Qué se traen? —
Duxo preguntó extrañado, terminando de secarse el cabello con su suave toalla blanca.
— Nada, nada, vine a recogerte, tienes que practicar el discurso de inauguración al evento y prepararte para la carrera de relevos —
Duxo asintió y tras tomar las cosas necesarias salió de la habitación, despidiéndose con un simple "bye" de su compañero. Los miembros de Capford no pensaban quedarse atrás y también estaban entrenando para sus respectivos eventos, incluso preparándose para hacer de suplentes en caso de que alguien se lastimara.
— Locochón, ve por Aquino, él también debe poner de lo suyo —
Nimu ordenó mientras tomaba un descanso para tomar agua, volviendo rápidamente a su entrenamiento.
— Cómo mandas —
El secretario le respondió en forma de broma y se dirigió a cumplir la orden, llegó a la habitación y tocó repetidas veces la puerta, no recibió respuesta.
— ¡Aquino levántate ya o rompo la puerta! —
Volvió a tocar pero siguió sin recibir señales de vida, suspirando lo llamó al teléfono pero este lo mandó directamente al buzón, estuvo 10 minutos en ese mismo lugar esperando a que la puerta abriera hasta que una amable señora del aseo lo notó desesperado.
— Disculpe, ¿se encuentra bien? —
Loco dirigió su mirada hacia ella y se le vino una idea a la mente.
— Si, si, no se preocupe, solo que mi compañero se llevó mi llave y ahora lo tengo que esperar —
La señora, tras escuchar la historia, se ofreció amablemente a abrir la puerta por él, Locochón tras haberle agradecido comenzó a buscar a la persona por la que había pasado todos esos problemas, grande fue la sorpresa cuando no lo encontró, abandonó la habitación y comenzó a buscar a los alrededores, preguntándole a los demás alumnos con los que se topaba en su búsqueda.
— "¿Aquino? No lo he visto" —
— "No he sabido de él desde que aterrizó el avión" —
— "¿El presidente está extraviado? ¿No deberíamos reportarlo?" —
El chico peli-gris se desesperaba más y más con cada respuesta que recibía, no lograba localizar al castaño por ningún lado, su habitación estaba vacía, Natalan tampoco sabía nada, fue con Nimu y ella lo mandó a la mierda por interrumpir su siesta post-entrenamiento; y ni siquiera Duxo que es su compañero de cuarto pudo dar información que ayudara a su localización. Locochón estaba en su límite de paciencia.
— Juro que mataré a ese idiota cuando lo encuentre.... — Así retomó su búsqueda interminable, ya hasta se sentía como en uno de esos libros de "¿Dónde está Wally?".
Por otro lado, Aquino estaba felizmente relajándose sobre una silla playera mientras disfrutaba de la vista que el mirador en el que se encontraba le proporcionaba, su teléfono estaba apagado y su rastreador de muñeca bloqueado, no había forma de contactarlo y él lo sabía, se notaba que no tenía intenciones de permitir que interrumpan su tiempo a "solas", sonrió para sí mismo y giró levemente su cabeza a un lado para observar una silla idéntica a la suya donde reposaba una foto de su querido enemigo.
— Lástima que el real no piense en nada más que en la escuela —
Aquino no percibía a Duxo como a un rival, para él Duxo era un simple pajarito jugando a ser un rey con el cuál entretenerse, le causaba ternura y eso terminó causando que se obtuviera una pequeña obsesión con el más bajo, una pequeña obsesión que sabía disimular lo suficiente para que nadie lo notara y que sus compañeros lo confundieran con un enamoramiento inocente. Aquino suspiró y tomó un sorbo de una lata de refresco que reposaba sobre el piso.
— Ya quiero ver con qué me sorprenderás hoy, Rethey —
Había comenzado a hablar con una foto, talvez ya es momento de que lo acepte y vaya a tomar algunas sesiones con su psicólogo privado.
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Wtf, ¿amor?
FanfictionDos escuelas con una rivalidad, dos consejos estudiantiles que la refuerzan, dos presidentes que se odian mutuamente... o tal vez no es así.