Cap. 5.

28 5 3
                                    

Meg

Era el mes de noviembre y el frio se sentía cada vez más, estaba saliendo de mi casa para dirigirme a la facultad, faltaban pocas semanas para terminar el semestre y la verdad es que Tom me tenía sorprendida, solo en los exámenes les iba un poco más, pero respecto a trabajos y tareas iba muy bien. Acomodé mi bufanda y mi boina cuando sentí que alguien cubrió mis ojos,

- ¿Cómo está la mujer más bella del mundo? - reconocí la voz de Alex de inmediato, últimamente ya casi no lo veía ya que decía tener mucho trabajo.

- ¿Shrek? - pregunte burlonamente, el quito sus manos y se paró frente a mí con una enorme sonrisa - Casi le atine - dije riendo.

- Que mala eres - me dijo riendo - ¿Vas a la universidad? - me pregunto, me quede seria ya que hasta hace una semana insistía en lo mismo de siempre.

- Si - respondí algo nerviosa.

- Te acompaño - dijo el ofreciéndome su brazo.

- Si, claro - respondí aceptando su brazo.

Comenzamos a caminar y mientras lo hacíamos platicamos como solíamos hacerlo antes, todo el camino reí a carcajadas, francamente me sorprendió que no me dijera algo de la universidad, más porque he notado que no le agrada la idea de yo sea la tutora de Tom, no me ha dicho nada, pero lo veo en su mirada, aunque creo que son alucinaciones mías porque también pareciera que a Tom no le agrada Alex del todo,

- Y ahora por tu culpa no puedo ver un perro callejero sin querer ayudarlo - dijo Alex.

- Son seres inocentes, nada nos cuesta ayudarlos y quererlos, yo porque mi madre los odia si no tendría como 20 - dije riendo, en eso vi pasar a Tom ignorándonos por completo a Alex y a mi - Bueno te dejo porque tengo que entrar a mi primera clase -

- Si, suerte - dijo el despidiéndose de mí.

A lo lejos vi a Amber, todo este tiempo ella ha estado molesta conmigo, más porque Tom y yo realmente la pasamos bien juntos, reímos y platicamos y nos hemos vuelto muy cercanos, pero ella no lo ve de esa manera, ella cree que entre Tom y yo hay algo más que una posible amistad. Entre al salón de clases y Tom ya estaba sentado, como siempre apartándome un lugar al lado de él, le sonreí y el me correspondió aunque no como suele hacerlo, tan guapo como siempre con esas trenzas perfectamente bien arregladas, un gorro que lo hacía ver aún más tierno, esa camisa azul desabotonada dejando ver la de tirantes que usaba abajo, el solo me veía sin decir nada lo cual era extraño ya que no le suele parar la boca,

- Amanecimos gruñones el día de hoy por lo que veo - dije mientras tomaba asiento.

- ¿Por qué lo dices? - me pregunto, pero esta vez desviando su mirada.

- Pasaste a un lado mío y me ignoraste por completo -

- No quise interrumpir, te escuchabas muy contenta -

- ¿Lo dices por? - le pregunte, el termino de sacar unas cosas y luego suspiro para inmediatamente verme.

- No me hagas caso, la verdad estoy preocupado por unas cosas - dijo sonriéndome.

- ¿Te puedo ayudar en algo? - pregunte, la verdad él ha sido muy reservado respecto a su familia y su vida, me preocupaba que fuera algo grave.

- Gracias pero... - dijo, tome su mano y él se quedó en silencio viéndome nada más.

- Confía en mi - los dos nos veíamos fijamente, realmente esperaba que me dijera que le pasaba y todo parecía indicar que así seria, abrió su boca para decir algo solo que nos interrumpieron.

Regresa a mi...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora