CAP 31

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T/N POV

El barco sólo zarpó un poco más. Porque poco después de que Dante y yo entráramos a la cabina en el fondo, hubo un choque repentino como si el barco hubiera chocado contra algo. Mi sospecha se confirmó rápidamente cuando el agua comenzó a inundar la cabina.

Tan rápido como pudimos, Dante y yo nos vimos obligados a salir nadando del barco. Nos encontramos con más lagartos y levanté mi nueva pistola de agujas antes de abrir fuego. A diferencia de todas nuestras otras armas, la pistola de agujas no fue afectada por el agua.

Una de las cuchillas intentó impulsarse a través del agua hacia nosotros, sin embargo levanté la pistola de agujas y le disparé una púa directamente a la cara, sacándole sangre rápidamente. Afortunadamente, el arma también tenía un modo semiautomático que me permitía seguir con breves ráfagas de púas.

El primer demonio lagarto cayó rápidamente y centré mi atención en el segundo. Sosteniendo la pistola de agujas con mi mano derecha, Dante simplemente se mantuvo atrás mientras yo disparaba otra ráfaga de agujas. Uno impactó la cabeza de la criatura mientras que el segundo la golpeó en el hombro. Esto hizo que se deslizara nuevamente en el agua.

Intentó impulsarse hacia mí nuevamente, sin embargo, rápidamente seguí con más disparos de aguja que finalmente detuvieron lo mataron permitiendonos a mí y a Dante finalmente continuar y eventualmente salir del barco que se hundía mientras descendía hacia el abismo acuoso debajo.

Seguimos una pequeña corriente de agua antes de regresar finalmente a tierra firme. Sabes, nunca pensé que diría que estaba ALEGRADO de encontrarme con los familiares muros del castillo de Mundus. Pero fue una bendición en comparación con el agua que había estado tamizando antes, al menos podía confiar en mis otras armas además de mi pistola de agujas.

Miré mi atuendo empapado antes de girarme hacia Dante y decirle: "Bueno, me alegro de que finalmente haya terminado" Dante simplemente respondió: "Bueno, nunca se sabe, es posible que pronto tengamos que regresar a más agua" Suspiré y dije: "Probablemente conociendo nuestra suerte"

Desde aquí, nos abrimos camino hacia un pasillo sinuoso donde finalmente nos encontramos con un esqueleto empalado en una pared de púas. En el esqueleto había un escudo que emitía una energía extraña, no hace falta decir que lo tomé, posiblemente viendo un uso para él más adelante.

Dante dio un paso hacia el brazo levantado del esqueleto y lo bajó, para sorpresa de ambos, escuchamos un ruido detrás de nosotros cuando una puerta de metal se abrió hacia un ascensor. Desafortunadamente, el piso en el que estábamos comenzó a moverse hacia atrás hacia la pared con púas a medida que emergían más púas del suelo.

Dante y yo corrimos contra el piso de reversa, evadiendo los picos hasta que llegamos al ascensor recién revelado. El ascensor nos llevó a una red de túneles donde nos encontramos con más espadas, una vez que las solucionamos, finalmente llegamos fuera del castillo.

A partir de aquí, todo fue sólo cuestión de retroceder un poco más por el castillo, luchando contra varias hordas de marionetas en el proceso hasta que finalmente nos encontramos de nuevo en ese gran patio donde inicialmente luchamos contra Griffon.

Esta vez, sin embargo, nos dirigimos hacia la derecha donde inicialmente encontramos esos dos escudos extraños con un aura extraña que los rodea. Usando el escudo emblema que obtuvimos del esqueleto en esas catacumbas, el escudo que bloqueaba nuestro camino desapareció permitiéndonos acceder a una puerta lateral.

Al atravesar la puerta, navegamos por otra serie de catacumbas, esquivando púas y otras trampas hasta que, al final, nos encontramos con un par de lanzas, no dignas de combate pero que probablemente serían necesarias para resolver un rompecabezas más adelante.

Regresando por donde vinimos OTRA VEZ, hasta que una vez más nos encontramos afuera en ese patio. No nos llevó mucho tiempo descubrir una puerta cerca de la que tenía el escudo, sin embargo, ésta tenía dos muescas que coincidían con las dos lanzas que encontramos.

Dante y yo colocamos uno cada uno haciendo que la puerta se abriera. Ambos lo superamos y nos encontramos en una especie de arena. En el centro había un gran sello azul, naturalmente nos acercamos a él y al instante, un familiar rayo rojo salió disparado sobre nuestras cabezas.

Miré hacia arriba y dije: "Oh, genial, este tipo otra vez" Tal como esperaba, el relámpago tomó la forma del muy familiar Grifo con el que literalmente habíamos peleado hace una hora. Sin decir una palabra, instantáneamente aterrizó en el suelo y atacó con una serie de rayos.

Me sorprende que no fueran esos pequeños ataques señuelo los que pudieran atraernos hacia ellos. En realidad parecían útiles, sin embargo, esta pelea se parecía más a nuestra batalla inicial. Preparé Eclipse y también a Cinder.

Disparé algunos tiros a la criatura antes de saltar sobre un obstáculo de relámpagos antes de disparar algunos más. Mientras tanto Dante se descargaba round tras round de Ebony y Ivory. Gracias a la naturaleza mágica de las armas, ninguno de nosotros necesitó recargar ni preocuparse por el consumo de munición.

Reanudamos el fuego antes de que Dante sacara a Alastair y yo a Ifrit. Luego corrimos hacia adelante, en lugar de realizar ataques cuerpo a cuerpo, una mezcla de cortes y golpes cayó sobre el Grifo antes de que de repente dejara escapar una ráfaga de electricidad que nos hizo retroceder a ambos.

Recuperándonos rápidamente, miramos hacia arriba para ver al Grifo caer al suelo, rompiendo un pedazo de la pared en el proceso. Al principio pensé que estaba muerto, sin embargo, pronto se levantó y dejó escapar un rugido antes de enviarnos un rayo de electricidad a cada uno de nosotros.

Luego, Griffon emitió un aura azul y comenzó a lanzarnos rayos. Dante y yo hicimos todo lo posible para esquivar los ataques y solo unos pocos de ellos nos alcanzaron. Activamos nuestros Devil Triggers y ahora éramos prácticamente intocables.

Pronto comenzamos un contraataque, ambos lanzándonos hacia adelante con nuestros Devil Triggers antes de lanzar una serie de cortes, puñetazos y puñaladas. Cambié a Eclipse y juntos, Dante y yo, lanzamos ataque tras ataque contra el Grifo hasta que finalmente, ¡fue derrotado!

El Grifo colapsó directamente sobre el sello azul en el centro de la arena. Hubo una energía etérea blanca que levantó al demonio en el aire antes de que, de repente, fuera golpeado por un pilar de piedra que lo inmovilizó contra el suelo, provocando que dejara escapar un rugido.

Dándonos una última mirada, el Grifo habló débilmente diciendo "Uh... Ambos tuyos son definitivamente los poderes de Sparda. No más..." Hizo una pausa por un momento, mirándonos a los dos antes de terminar "Pero yo ¡No puedo dejar que ninguno de ustedes viva porque yo sirvo a mi Maestro, Mundus!

Dante advirtió al demonio alado "Pero no puedes luchar con esa herida" Griffon, sin embargo, nos aseguró. "¡Poderoso es el poder de Mundus! ¡Antes de que gritara Maestro! ¡Concédeme una última oleada de poder, el poder para acabar con ellos!"

Para mi sorpresa, miré hacia arriba y mis ojos se abrieron de puro terror cuando vi tres puntos rojos, envueltos en una nube oscura con relámpagos rojos destellando a su alrededor. ¡Había encontrado estos mismos tres puntos rojos en algún lugar antes!

Mis piernas comenzaron a temblar cuando di un paso atrás. Griffon murmuró "Maestro Mundus". A lo que escuchamos una voz profunda que decía "Griffon, me has fallado. ¡Ya no eres digno!" Esa voz debe haber sido la voz de Mundus.

Esto era demasiado. Cuando el avatar de Mundus salió disparado hacia Griffon, matándolo en un instante. Sin embargo, no estaba prestando atención a eso, mi atención se centraba únicamente en los tres círculos rojos. Y fue en ese momento que me di cuenta.

¡Mundus estuvo allí la noche que ASESINARON a mi madre!

El tercer hijo de Sparda (Devil May Cry, Lady x Male Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora