Contrato de Confidencialidad |Lizkook| +18

[capítulo 15]

En cuanto entramos al departamento, no lo pensé dos veces cuando decidí abrir mi gran boca.

—¿Estás con Nayeon? —Solté de repente.

—¿Qué? —Preguntó.

—En las noticias dicen que ustedes están juntos.

—¿Y hay problemas con eso? —Se acercó a mí.

—Claro que lo hay, no quiero ser la tercera —Aclaré.

—Li, mi relación con Nayeon es falsa —Dijo con una sonrisa —Hay un artista de su empresa que está metido en un problema, esto que hacemos es mera cortina de humo.

—¿Ah sí? —Asintió —Bien.

Ahora me sentía como una tonta, había hecho el ridículo total, y es que en realidad yo no tenía por qué pedirle explicaciones a él, y mucho menos él debía darmelas.

Lo nuestro es sólo sexo, y es algo que ambos deberíamos tener muy en claro, lamentablemente yo ya había roto la primer regla.

—Bien ¿Qué dejamos pendiente en la fiesta? —Jungkook me tomó de la cintura y me besó —Te haré mia una y otra vez Lisa.

La noche que tanto había esperado, por fin había llegado. Jungkook me tomó del cuello atrayendone más a su cuerpo, este de sentía tan caliente.

Me tomó en sus brazos y nos dirigió a la habitación, en donde sin ningún tipo de piedad, me aventó a la cama y se deshizo de toda mi ropa, dejándome a su merced.

Abrió mis piernas, y su rostro se posicionó en mi femidad, lamiendo justo mis puntos débiles.

—Ah Jungkook —Solté en medio de jadeos.

Con una mano estimulaba mis pechos, y con la otra apretaba más a Jungkook hacia mí, lo necesitaba tanto. La habitación se sentía caliente por todo el ambiente, realmente no sé cómo vaya a terminar ésto.

—Te necesito adentro —Pedí.

—Como desees, preciosa.

Con lengua viajó de mi femidad, hasta mis labios, haciendo de un beso sumamente necesitado, excitado, donde nuestras lenguas peleaban por ver quién tenía el control.

Se posicionó en mi vagina, y sin previo aviso, lo metió, provocando que un gemido saliera de nuestros labios.

El sonido tan obseno de nuestros cuerpos chocando sin piedad, era lo que único que resonaba en las cuatro paredes.

—Más-fuerte —Pedí mirándolo a los ojos.

Este hombre me hacía mojarme tanto con sólo mirarlo. Tal y como pedí, sus embestidas fueron más fuertes.

—Aahh —Gemía sin piedad —Más.

—Ah Lisa, estás tan estrecha —Su voz ronca me ponía tanto —Eres mía, Manoban, mía.

Su mano se posó en mi cuello, apretando un poco, en tan poco tiempo, llegué a mi tan esperado orgasmo.

—Esto no acaba aquí —Salió de mí —Date la vuelta.

Cómo un cachorro obedeciendo a su amo, accedí, me dí la vuelta dejando todo mi cuerpo a su vista. Solté un quejido cuando sentí su mano dar un leve golpe en mi trasero.

—Eres mia Lisa —Volvió a entrar en mí.

Juro que no había poder humano que pudiera callarme en estos momentos, sus movimientos eran firmes y rápidos, me excitaba más el hecho de que me diera incontables nalgadas, y repitiera que era suya.

—Dilo —Habló —Dí que eres mía.

—Aahh —Gemí —S-soy tuya —Alrgué mis palabras debido al placer que estaba sintiendo —Aahh J-junkook

—Aahh —Otra nalgada —Gime Lisa, quiero saber que sólo yo te pongo así.

No era necesario que lo pidiera, mis gemidos salían por él únicamente.

Después de una larga, pero en verdad muy larga sesión de sexo, ambos nos quedamos dormidos.

[...]

Eran ya las diez de la mañana, yo ya me encontraba en mi trabajo, Jungkook estaba en la empresa.

—Entonces ¿tú y Jungkook? —Susurró Rosé, pero la callé más —No diré nada, lo juro.

—Gracias —Sonreí —¿Entonces tú y Hoseok?

—Es sólo sexo —Respondió y asentí —La verdad, no —Abrí los ojos —Es decir, si es sexo nada más, pero el me gusta.

—Créeme que te entiendo —Le respondí —Me pasa lo mismo con Jungkook, sólo que él y yo hemos firmado un contrato.

—¿Contrato de confidencialidad? —Preguntó y asentí —Suertuda —Me codeo.

—Te invito a casa esta noche —Le mencioné —Para que platiquemos sobre todo esto ¿Te parece?

—¡Claro! —Asintió feliz.

Rose y yo habíamos hecho amistad hace unos años, la verdad la quería mucho, era una amiga increíble, no me imagino una vida sin ella.

Al finalizar nuestra jornada, fuimos a un super mercado, donde nos atascamos de chatarra para la noche, pasamos a comprar pizza, soju y nos fuimos a mi casa.

Esta noche me iba a desahogar por completo con ella.

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